La cara más cruda de la crisis social y económica ocn la que se despide el presidente Mauricio Macri se ve reflejado en las cifras de la caída del empleo. En este sentido, en el último año se perdieron 378 trabajos registrados por día, lo que implica 138.690 puestos eliminados en un año.
Los datos se desprenden del último estudio del observatorio de Políticas Públicas de la Universidad de Avellaneda (Undav) y marcan una debacle atroz en los sectores de manufactura, comercio, transporte, comunicaciones, hoteles y restaurantes.
“El daño a la industria no es un efecto colateral sino una consecuencia directa del modelo”, señalaron desde el organismo. En este sentido, la industria manufacturera perdió 51.263 trabajadores entre septiembre de 2018 y el mismo periodo de 2019.
En tanto, 41.332 fueron los que cayeron en los sectores de comercio y reparaciones, más lejos están los del transporte con 15.960 puestos eliminados y, por último, 6.406 en hoteles y restaurantes.
“Menos empleo de calidad: en el último año se destruyeron 94.187 puestos solo en el sector registrado de la economía. En total los trabajadores registrados cayeron en 238.000 puestos de trabajo desde marzo de 2018”, enfatizaron desde el observatorio.
Desde la Undav también marcaron que no solo hubo una merma en los puestos de trabajo sino también en la calidad de los mismos, ya que muchas personas debieron aceptar empleos en malas condiciones para solventar sus gastos.
“La política económica llevada adelante desde diciembre del 2015 tuvo dificultad para crear empleo en el sector formal. Esto es, aquel en el que los trabajadores están protegidos con un seguro médico, ART y realizan aportes a la seguridad social, entre otras cosas”, aseguraron.
Cabe destacar, que según los datos oficiales difundidos por el INDEC en la última parte del año la desocupación pasó a ser la más alta de los últimos 14 años. Uno de cada diez argentinos está sin trabajo. Son más de dos millones de personas en todo el país.
