La intensa rosca por la definición de los funcionarios de ley que formarán parte de la nueva Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires viene mal barajada desde el comienzo y sus designaciones vienen “en cuotas”.
En la sesión preparatoria del lunes 10 de diciembre en que se ungieron al presidente y los vices, hubo acuerdo para designar a Miguel De Isi, ex secretario de contrataciones del Municipio de La Costa, como secretario administrativo.
Ese mismo día también se resolvió poner a Roberto Fernández, ex senador provincial por la Sexta sección electoral y oriundo de Tres Arroyos, como pro secretario administrativo, pero no se avanzó más y quedaron cuatro vacantes.
En esa dirección, como una formalidad se extendió la sesión preparatoria para el jueves 19, misma jornada en que se votó el proyecto de Ley de Emergencia de Axel Kicillof que ya fue promulgada.
Ese día, tal como relató Diputados Bonaerenses, mientras los diputados empezaban a poblar el recinto que da a calle 53, repentinamente se anunció que “la sesión se caía”.
Así hubo indefinición hasta la madrugada del viernes cuando a minutos de cerrar la sesión el presidente de la Cámara Federico Otermín llamó a nombrar a un secretario legislativo.
A propuesta del presidente del bloque del Frente de Todos se votó a Mauricio Barrientos, diputados hasta hace algunas semanas y exintendente de la localidad bonaerense de Chacabuco.
“Juro por dios, por la patria, por la memoria de Perón, Evita, Néstor, Cristina, por los 30 mil desaparecidos, y los compañeros y compañeras que integran el campo popular”, sostuvo a la hora de prestar juramento.
Acto seguido, Otermín otorgó la palabra al jefe de la bancada de Juntos por el Cambio, Maximiliano Abad, para que proponga al prosecretario administrativo, a lo que respondió que sería “acercado en sesión que viene”.
De esta manera, todavía quedan vacantes los lugares de prosecretario administrativo y de secretario y pro de relaciones institucionales, estos dos son cargos que no existen en el Senado bonaerense.
Es decir que recién se definieron el 50% de los funcionarios de ley. Ahora, se prevé que la rosca quede resuelta en la sesión de este jueves en donde se discutirá la Ley Fiscal 2020, el cargo de Subtesorero bonaerense y los directores del Bapro.
En la hermética indefinición opera de fondo la puja al interior del bloque oficialista por el manejo de las cajas que tienen disponible estos tres espacios de poder en la Cámara baja bonaerense.
Según pudo reconstruir este medio, los cuatro cargos en disputa tienen manejo de presupuesto y comparten con los legisladores la potestad de definir contratos, becas y subsidios.
Una forma de aceitar los demorados acuerdos fue establecer un esquema de “doble firma”, mecanismo resuelto para compartir el esquema de poder, al igual de lo que sucedió con la presidencia y vices de la Cámara.
Foto: HCD
