Luego de que los maleteros de la terminal de ómnibus de Mar del Plata decidieran bloquear el acceso a las unidades al edificio, el intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro, lamentó lo que ocurre y pidió una solución pronta, aunque se despegó y dijo que es “una cuestión entre privados”.
“No tener la terminal en toda su dimensión es algo que afecta a todos los marplatenses”, lamentó el jefe comunal sobre el conflicto que mantiene a 28 trabajadores bloqueando el acceso a la terminal de ómnibus de la ciudad.
En esa línea, Montenegro añadió que “nunca la forma es complicándole la vida a un tercero” y explicó que la manifestación se llevó “a un lugar donde el único que está sufriendo es el que viene a visitarnos”.
Sucede que, justamente, para el cambio de quincena de enero los hoteleros y gastronómicos de la ciudad previeron una ocupación superior al 75%. “Es una complejidad extrema para todos los que utilizan un sistema de transporte muy utilizado durante el verano”, consideró el alcalde.
Pese a que el intendente deslizó que es un conflicto en el que no debe interceder la Municipalidad, destacó que el secretario de Gobierno se puso a disposición para llegar a un diálogo, pero la medida de los maleteros se extendió de todas formas.
Asimismo, Montenegro pidió que “el conflicto se resuelva antes del fin de semana porque se espera que sea uno de los mejores de la temporada”. En rigor, la temporada mostró un notable repunte en diciembre, con casi 830.000 turistas que pasaron por La Feliz.
La protesta de los maleteros comenzó el sábado con un bloqueo total a la terminal que provocó caos vehicular y que los usuarios tengan que caminar hasta 300 metros con su equipaje para abordar las unidades. Según dijeron, no se irán hasta tener un compromiso desde Nación, Provincia o el Municipio.
