Sabidas las intenciones del presidente Alberto Fernández de eliminar los ajustes salariales por inflación para el sector público, uno de los puntos clave que deberá resolver el gobernador Axel Kicillof será la instauración o no de la clausula gatillo para los docentes de la provincia.
Aunque en un primer momento desde el sector manifestaron cierta resistencia a cambiar la modalidad de actualización del salario, en las últimas horas la declaración de un gremialista bonaerense dejó las puertas abiertas.
Así lo adelantó el secretario general de Udocba, Miguel Ángel Díaz. “Nosotros queremos recuperar nuestro salario, queremos que esa recuperación se dé en el tiempo a través de la cláusula gatillo o mecanismo salarial”, planteó.
“A partir de la paritaria nacional, convocada para la última semana de enero, se comenzará a delinear la provincial”, precisó Díaz, quien aseguró que durante la gestión de Mauricio Macri los trabajadores perdieron un 20 por ciento del salario.
Aunque evitó dar precisiones sobre el porcentaje que le van a solicitar la Provincia, el titular de Udocba deslizó la posibilidad de aceptar un acuerdo sin dicha cláusula, pero “con un mecanismo de recomposición gradual”.
“La cláusula gatillo tiene que garantizar cualquier acuerdo en el tiempo, porque desgraciadamente hay una inflación del 2 ó 3 por ciento mensual. Tiene que haber un mecanismo periódico para ajustar el salario”, insistió Díaz en declaraciones radiales.
El mecanismo de actualización automática de la paritaria fue conseguido por el Frente de Unidad Docente luego de varios años de lucha contra la gestión de María Eugenia Vidal. El cambio que se evalúa desde el Gobierno implicaría que las subas se acuerden entre las partes.
Por último, Díaz enfatizó la necesidad de “blanquear nuestros salarios”. “Durante todas estas gestiones, la anterior y la anterior de la anterior, lo que hicieron es despanzurrar nuestro salario, romper la pirámide salarial y eso tiene que volver a ubicarse en su lugar”, cerró.
