Los abogados que representan a los padres de Fernando Báez Sosa como particulares damnificados pedirán que se profundice la investigación, ante la sospecha de que podría haber "un rugbier 11".
El posible sospechoso número 11 aparece en un video posterior a la agresión que lo muestra pasar delante del restaurante "Ciprianny", en la vereda de enfrente al boliche Le Brique, de Villa Gesell, donde mataron a Fernando.
Además, en el requerimiento de prisión preventiva presentado ante el juez de la causa por la fiscal Verónica Zamboni, la letrada habla de un miembro número 11 que aparece grupo de WhatsApp donde se comunicaban los rugbiers.
El misterioso sospechoso es mencionado como "NN Santino" y en el chat del servicio de mensajería para teléfonos móviles figura como "Salvi", por lo que no se trataría de ninguno de los imputados en el expediente.
De esta manera, el abogado Fernando Burlando advirtió que en la audiencia de mañana donde se tratará el pedido de prisión preventiva "no sólo hablaremos de la calificación y de los liberados, sino también de lo que está pendiente".
Este jueves por la mañana en el Juzgado de Garantías Nº 6 de Dolores, su titular, el doctor David Mancinelli, determinará si acepta o no el pedido de prisión preventiva o si decide o recomienda una medida intermedia.
En el caso de que la acepte, los ocho acusados que quedaron detenidos en la cárcel de Dolores podrían ser trasladados a otro penal, que podría ser la Unidad Nº 57 de Campana.
Los investigados que están detenidos son Máximo Thomsen (20), Ciro Pertossi (19), Luciano Pertossi (18) Lucas Pertossi (18), Enzo Comelli (19), Matías Benicelli (20), Blas Cinalli (18) y Ayrton Viollaz (20).
