A horas de que el Congreso nacional comience a debatir las jubilaciones de privilegio de jueces y fiscales federales, el gobernador Axel Kicillof, descartó que la discusión se cuele en la Legislatura bonaerense porque el escenario de los magistrados provinciales no es la misma que en Nación.
“La situación salarial de la Justicia provincial es distinta. Charlé con los jueces de la Suprema Corte de Justicia y es distinta porque tienen equiparación con el resto de la administración pública y los sueldos son, en general, bajos en comparación con otras jurisdicciones”, destacó.
Según pudo saber Diputados Bonaerenses, la ley provincial contempla que los funcionarios judiciales que quieran acceder a su jubilación deben contar con 30 años de aportes para retirarse con el 82% del salario que percibían antes de hacerse efectiva la jubilación.
No obstante, los ministros de la Corte tienen otro régimen que contempla que no es necesario cubrir 30 años de aportes, aunque sí un mínimo de diez como jueces supremos, lo que les permite retirarse con el 100%. En ambos casos las jubilaciones se ajustan por la paritaria sectorial.
Pese a que la discusión no se abrirá en provincia de Buenos Aires en lo inmediato, este miércoles la Cámara de Diputados comenzará a discutir en comisiones la modificación al régimen especial de jubilaciones y pensiones del Poder Judicial y cuerpo diplomático.
Las comisiones de Previsión Social y la de Presupuesto fijaron las 11.30 como horario para comenzar a discutir el proyecto. La pretensión del oficialismo es emitir dictamen de mayoría este miércoles mismo para aprobarlo el jueves en sesión extraordinaria.
Si bien en Juntos por el Cambio están dispuestos a dar el visto bueno, las posiciones son disímiles respecto a puntos específicos de la iniciativa, según adelantó el diputado Pablo Tonelli.
Entre las propuestas del legislador PRO aparece la idea de atar la movilidad jubilatoria a “la remuneración del último cargo desempeñado, a condición que lo haya hecho durante los últimos cinco años". También busca llevar la edad de jubilación a los 65 años.
