Por primera vez desde que el titular del Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA), Homero Giles, concretó un acuerdo con el Consorcio del Centro de Buenos Aires (COCEBA) en la Séptima sección electoral, el Círculo Médico de Olavarría dejó la puerta abierta para aceptar el nuevo convenio con el que se atenderá a los 28 mil afiliados de la obra social provincial que viven en la ciudad cabecera de la región.
Es que, luego de que el IOMA haya cortado el acuerdo de más de 50 años con la Federación Médica de la provincia de Buenos Aires (FEMEBA), Giles apuró un convenio con COCEBA, que es administrado por los municipios de Olavarría, Azul, Laprida y Daireaux, los primeros dos en manos de intendentes de La Cámpora y los otros de kirchneristas de primera hora. Si bien en un principio era resistido, ahora los médicos parecen aflojar.
“Si la mayoría de nuestros médicos está de acuerdo, firmaremos el convenio con COCEBA para que se trabaje por adhesión voluntaria, siempre a través del Círculo Médico. Los valores que ofrece son similares a los de IOMA, incluso un poco mejores en consultas particulares”, reconoció el presidente de los médicos de Olavarría, Andrés Stratta.
Vale mencionar que, en los cuatro distritos en los que funciona el COCEBA, los afiliados denuncian que el corte de prestaciones médicas generó que los hospitales municipales registren una violenta suba de la demanda, que se tradujo en una tardanza de turnos, en una serie de renuncias de profesionales y en denuncias sobre la poca capacidad de los nosocomios para recibir casos de alta complejidad.
En ese sentido, a pesar de que Stratta reconoció que los afiliados de IOMA actualmente son “población cautiva”, ya que les siguen descontando el aporte de la obra social pero tienen que pagar por consultas y estudios, el Círculo Médico comenzó a enviar mails a sus profesionales para evaluar el posible número de trabajadores que apoyan al COCEBA. “Queremos que esta situación termine de una vez por todas. Hay compañeros del hospital sin poder atender a sus pacientes gracias a IOMA”, pidió.
A diferencia de lo que están decidiendo los médicos, los vecinos de Olavarría se vienen manifestando en contra. Todos los martes, afiliados autoconvocados se reúnen en el Paseo Jesús Mendía para oponerse el diálogo de Giles con COCEBA bajo el mensaje “no queremos intermediarios”, y para exigir que el IOMA realice un convenio directo con el Círculo Médico local.
En este sentido, la decisión de la mutual bonaerense de escoger un nuevo intermediario, en este caso el COCEBA, choca con los conceptos vertidos la semana pasada por el ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak. “Decidimos prescindir de intermediarios en ciertas localidades porque buscamos que el dinero llegue directamente a los médicos”, dijo el camporista. Unos días antes el propio Axel Kicillof sostuvo que “todo el mundo sabe que si hay intermediarios hay un adicional“.
Según expusieron los afiliados de Olavarría, desde que está presente el COCEBA la obra social social no cumple con las coberturas básicas como tampoco con aquellas de alta complejidad y sólo ofrecen prestaciones tres medicos de UDOCBA, los policonsultorios en María Auxiliadora y el hospital municipal. Además, si los vecinos quieren realizar una consulta con los médicos de cabecera deben afrontar un pago de $20 a $25 mil y esperar el reintegro, algo que no viene sucediendo en los últimos tiempos.
Lo curioso de todo esto, es que hace apenas un par de semanas el Círculo Médico de Olavarría sometió a votación si aceptaban o no el convenio con COCEBA y el resultado fue contundente: de 200 profesionales, 129 se manifestaron en rechazo. Ahora, los trabajadores de la salud pegaron un volantazo y comenzaron a ver con buenos ojos trabajar con el Consorcio como intermediario.
En Azul, también los vecinos protestan contra el COCEBA
Al igual que en Olavarría, vecinos del municipio de Azul también protestaron contra el acuerdo con COCEBA, y prepararon una demanda colectiva para presentar ante la Defensoría del Pueblo, con el objetivo de dar marcha atrás al pacto que generó un corte de prestaciones en el municipio, Laprida, Daireaux.
“Azul es una ciudad muy tranquila, es muy raro que acá se realicen manifestaciones. Sin embargo, hay muchísima preocupación por parte de los vecinos con respecto a la situación con IOMA, porque están completamente desprotegidos”, sostuvo una fuente que viene siguiendo el conflicto en el distrito de la Séptima sección electoral.
Ahora, frente a cualquier eventualidad o turno médico, los afiliados de la obra social deben costear por su cuenta la consulta con el profesional. “Muchos padres me llaman porque suspenden el turno conmigo para llevar a los hijos a controlarse al hospital municipal porque no tienen dinero para pagar la consulta”, contó la pediatra y concejala de la Unión Cívica Radical, Pilar Álvarez.
Ahora, los ojos están posados en el Círculo Médico de Azul: o si siguen los pasos de sus pares de Olavarría y ceden para comenzar el diálogo con el COCEBA, o si acompañan los reclamos de los vecinos para que otorguen un convenio directo entre ellos y el IOMA, sin ningún intermediario.
