El Gobierno bonaerense aseguró este miércoles que todavía no está definido quién tendrá que pagar los cuatro días de aislamiento obligatorio en hoteles que deberán transitar todos aquellos bonaerenses que lleguen de viaje desde el exterior.
Si bien ayer Axel Kicillof sostuvo que serían los ciudadanos quiénes deban afrontar el costo de la estadía en los hoteles, parece que la decisión no está firme. O por lo menos eso fue lo que manifestó la ministra de Gobierno, Teresa García, en declaraciones radiales este miércoles.
La exsenadora provincial directamente puso en duda que sean los vecinos quiénes deban asumir el pago de los hoteles, que tendrían un piso de $2.500 por día, es decir una base de $10.000 para los cuatro días de aislamiento. Todavía la cifra no está clara, tampoco quien deberá asumirlo, según parece.
Teresa García manifestó que "se está trabajando" en ver si la cuarentena obligatoria en el hotel será "a costo de la Provincia o a costo del viajero". “Se está trabajando en la forma de reglamentación con un registro de hoteles en la provincia para que se puedan elegir”, añadió.
Luego, la ministra de Gobierno reparó en que “se está trabajando en ver si eso es a costo de la Provincia o a costo del viajero”.
De acuerdo a lo que anunció ayer Kicillof, los otros tres días de aislamiento obligatorio que deben transitar los viajeros que ingresan al país -para completar la semana de medidas de cuidado- serán en sus domicilios particulares.
La medida se tomó por los altos índices de incumplimiento a la cuarentena obligatoria para viajeros y el firme temor de que ingresen más casos de la variante Delta del coronavirus, altamente más contagiosa que las anteriores cepas de la enfermedad.
En el Gobierno bonaerense advierten que, de las 600 personas habilitadas a ingresar al país por día de acuerdo a las nuevas restricciones, el 45% son residentes en la provincia de Buenos Aires, es decir unos 270. Ayer Kicillof adelantó que la normativa iría en línea con la nacional. Todavía no hay nada oficial.
De esos 270 viajeros por día que ingresaron la semana pasada, el Ejecutivo provincial detectó que alrededor del 33% no cumplió con el aislamiento dispuesto y rompió la cuarentena luego de tocar suelo argentino. Naturalmente, si estuvieran contagiados con la variante Delta la esparcirían entre sus allegados.
Teresa García defendió la medida por la "gran preocupación" que genera que la cepa Delta tenga circulación comunitaria. "Es una preocupación realmente, que además ha sido público ayer que la manera en que esta cepa ingresa al país primero y luego a la provincia de Buenos Aires es con la gente que llega del exterior", dijo en diálogo con El Destape Radio.
Vale recordar que, hasta el momento se registraron tres casos de la variante Delta en el país, tras ser hallada en dos chicos que viven en la Ciudad y regresaron desde París el 24 de abril; y en otra persona que llegó a la Argentina el 4 de junio desde Estados Unidos.
"Eso es lo que estamos tratando de limitar (el ingreso de la variante) acompasadamente con intensificar el plan de vacunación e ir liberando sectores de franjas etarias para que puedan ser vacunados lo más rápido posible", remarcó García.
