Un relevamiento de la alianza global Planificación Familiar 2020 evidenció que a partir de un mayor uso de anticonceptivos modernos, se logró evitar 21 millones de abortos inseguros y 119 millones de embarazos no deseados en 2018, en los países en desarrollo.
Esta asociación internacional se encarga de defender los derechos de las mujeres y de las jóvenes para decidir libremente y por ellas mismas si deciden tener hijos, cuántos quieren tener y cuándo.
“Cada día que pasa se les niega a millones de mujeres y niñas el derecho a escoger su propio futuro”, argumentó la directora ejecutiva de la ONG, Beth Schlachter, a pesar de los datos positivos que muestra el informe.
En ese sentido, los métodos anticonceptivos que se utilizaron son aquellos inyectables, las píldoras y el implante subdérmico, en los 69 países con rentas más bajas del mundo, con 9 millones de nuevas incorporaciones durante 2018 y 53 millones en los últimos 7 años.
“Tenemos como objetivo ampliar el acceso a información, servicios y suministros de planificación familiar a 120 millones de mujeres y niñas, en 69 de los países más pobres del mundo para el próximo año”, explicó la directora de la Asociación.
Este informe fue presentado el lunes porque la Asociación Familiar, que trabaja con diferentes gobiernos, el sector privado y organizaciones sociales, con perspectiva al inicio de la Conferencia Internacional de Población y Desarrollo, a desarrollarse este martes en Nairobi.
Por otro lado, la ONG sostiene que en todo el mundo, un total de 922 millones de mujeres usan métodos anticonceptivos, de las cuales 842 millones utilizan aquellos más modernos, mientras que 80 millones optan por los tradicionales.
La esterilización femenina encabeza el ranking como método anticonceptivo más frecuente a nivel global, con 219 millones de mujeres esterilizadas, según un informe de la ONU sobre 195 países.
