En medio del aumento de contagios de coronavirus (Covid-19), propietarios de complejos deportivos le enviaron al intendente de La Plata, Julio Garro, un protocolo de seguridad e higiene para que las canchas de fútbol 5 y fútbol 7 puedan volver a abrir sus puertas.
En ese sentido, lo hicieron luego de que el propio alcalde les haya pedido que presenten las medidas de seguridad durante estos días, durante una reunión que mantuvo junto a los dueños de estos complejos deportivos que se realizó durante el mes de agosto.
De esta manera, esta actividad es una de las que la municipalidad de La Plata se encuentra analizando luego de permitir la vuelta del golf, el tenis y demás deportes individuales que fueron habilitados desde el 24 de agosto, impulsada a través de la publicación de la decisión administrativa 518/2020 de Jefatura de Gabinete de Ministros del gobierno de la Nación.
Entre algunos de los puntos destacados del protocolo se menciona que antes de cada partido, todos los jugadores deberán inscribirse siguiendo al pie de la letra un proceso en el que llenarán una planilla con datos personales para conocer el estado de salud de cada persona.
Para ello, cada uno de los que quiera ingresar al complejo deberá firmar una declaración jurada que indique que el individuo no estuvo en contacto con alguien contagiado de coronavirus, que no presenten síntomas y que se cumplirá con todo lo requerido por el predio.
En consecuencia, será obligatorio ingresar con tapaboca y usarlo en todo momento en el predio, excepto durante el partido. Además, se va a delimitar una zona de espera especial para los jugadores, previo a los partidos y los vestuarios tendrán que tener una limpieza especial y se limitará su ingreso.
En tanto, habrá estaciones de limpieza de manos, exigiéndoles a todos que lo hagan con agua y jabón durante 40 segundos como mínimo; se les proporcionará alcohol en gel y otros elementos de desinfección, y en las paredes habrá gráfica indicando cuáles son los cuidados. Además, entrarán únicamente quienes vayan a jugar.
Asimismo, se contemplan 10 minutos entre cada partido para evitar que los jugadores se crucen, mientras se desinfectan los postes, arcos y pelotas, los horarios de comienzo de cada partido serán escalonados para evitar aglomeración fuera de las canchas y no se permitirá el ingreso a mayores de 65 años.
Bajo esta situación, la decisión final la tendrá el intendente Garro quien deberá sacar del medio y definir si aprueba finalmente o no la apertura de los complejos deportivos, que en un principio había sido pensada para septiembre.
