En la sesión ordinaria de este jueves, la Cámara de Diputados bonaerense aprobó y convirtió en ley la profesionalización del ejercicio de las y los terapistas ocupacionales de la Provincia de Buenos Aires, quienes hace diez años luchan por ella.
Es una iniciativa de la diputada mandato cumplido Lucía Portos, que establece la creación del Colegio profesional para regular la actividad de este conjunto de trabajadores, que son cerca de 6.000 en el territorio bonaerense.
Gracias a esta normativa, las y los terapistas ocupacionales podrá tener un marco regulatorio al momento de ejercer sus tareas. Quienes ejercen esta profesión analizan, evalúan e intervienen sobre el desempeño ocupacional de quienes poseen o están en riesgo de desarrollar restricción en la participación, limitación en sus actividades, enfermedades y/o lesión.
“Con este proyecto estamos construyendo derechos y reparando deudas históricas que tenemos en la provincia. Las terapistas ocupacionales, la mayoría mujeres, vienen planteando la demanda que tiene muchísimos años, es una profesión precarizada y que no se ha contemplado a lo largo de los años a pesar del lugar tan importante que tienen en la vida cotidiana”, dijo la diputada del Frente de Todos, Florencia Saintout.
La falta de regulación les impedía ser reconocidos en sus lugares de trabajo, mientras que ahora la jerarquización de la labor profesional evitará la precarización laboral. Además, les permite congeniar con las obras sociales, cosa que hasta ahora tenían vedado.
En tanto, el Colegio tendrá la atribución de reglamentar las condiciones del trabajo, proponer y gestionar los aranceles, detectar el ejercicio ilegal de la profesión y crear el código de ética pertinente.
“Desde la pandemia de la polio, a partir de allí las terapistas se encargaron de abrir las puertas para discapacitados, adultos mayores y personas a las que se le dificulta. Esto que se tendría que haber contemplado previamente, cuando llegó el momento luego de la polio de dar lugar a estas profesiones la dictadura había destruido ministerios y fue imposible”, manifestó la legisladora de La Plata.
Se trata de una disciplina de grado universitario, y esta normativa viene a regular el ejercicio para garantizar la excelencia y la ética en las prácticas profesionales y fomentar el desarrollo de la profesión para asegurar la calidad de vida de las y los habitantes del territorio bonaerense.
Además, prevé la formación de delegaciones regionales del Colegio con el fin de ser de fácil acceso a los terapistas que residan en las jurisdicciones en las que se habiliten esas dependencias.
Uno de los puntos de la iniciativa señala que luego de la matriculación, el profesional podrá ejercer la actividad de modo individual o como parte de grupos interdisciplinarios en instituciones públicas o privadas, como también en consultorios o domicilios.
Además, aquellas personas que se hubieran titulado en instituciones privadas, deberán realizar un ciclo curricular complementario para alcanzar el título de grado universitario que exige la ley.
“En una misma ley votamos para garantizar derechos laborales y ampliar los de las poblaciones más vulnerabilizadas. Es un proyecto que se trabajó desde abajo hacia arriba, lo tomó la diputada Portos pero fue gracia sal trabajo de las organizaciones, fuimos aprendiendo de qué se trataba esta profesión y esta legislatura tiene el orgullo de hacerlo”, concluyó Saintout.
La vicepresidenta de ATOPBA, Claudia Spidalieri, señaló a Diputados Bonaerenses que vienen luchando desde los años '80 por esta ley y marcó que "es un hecho histórico para los más de 6 mil que ejercemos en la Provincia y los miles que lo hacen en el país. Es un día de gran festejo y de inmensa satisfacción".