El feminista menos pensado resultó vestir sotana y dirigir la Arquidiócesis de La Plata. El Arzobispo Víctor “Tucho” Fernández rompió con la grieta entre la Iglesia católica y el movimiento de mujeres, trans, travestis y no binarios y apoyó el 34° Encuentro Plurinacional el próximo 12, 13 y 14 de octubre.
“Son mujeres de muchos colores, con diversas formas de defender sus derechos y con diferencias entre ellas. Las une el sueño de una verdadera igualdad, y la ira se entiende cuando se recuerda la historia, siglos de opresión, de humillación, de dominio machista, de violencia”, describió.
En este sentido, cabe remarcar que la actitud contemplativa del líder religioso es un gesto que llama a terminar con los prejuicios y los miedos hacia las más de 150 mil mujeres y disidencias sexuales que colmarán las calles de La Plata en el fin de semana.
“A veces la bronca se concentra contra la Iglesia, que necesita una autocrítica en este tema, como en tantos otros. Durante tres días, miles de mujeres se reunirán para reflexionar sobre sus derechos y expresar su punto de vista”, destacó el Arzobispo.
Fernández, que llegó en sucesión de Héctor Aguer, marcó una gran diferencia con su predecesor, el autor de columnas en los medios tradicionales platenses y en las mismas misas, donde disparaba discursos de destrato hacia las mujeres y siempre se expresó en contra de los avances en materia social y sexual.
“Corre por las redes que prometen quemar y destruir. Estoy seguro de que la mayor parte desea hacerse oír pacíficamente, reivindicando un legítimo derecho a protestar. Las que quieren dañar y destruir no las representan a ellas ni a la inmensa mayoría de la sociedad”, remarcó Fernández.
Así, puso paños fríos a la tensión de varios vecinos y grupos conservadores en la ciudad de las diagonales, incluyendo al propio intendente Julio Garro, quien pidió a las asistenses “cuidar el patrimonio”, como si se diera por sentado que en el evento feminista más grande del año se dispusieran a romper todo a su paso.
“El sueño es que brille cada vez mejor la igualdad entre todos los seres humanos y el inmenso valor de cada persona más allá de su color, origen, ideas, desarrollo y orientación sexual”, cerró el Arzobispo.
