(*) Por Juan Manuel Negri
Más allá de quién se imponga en la provincia de Buenos Aires en las elecciones generales de este 22 de octubre de 2023, la Legislatura bonaerense, que quedó en el ojo de la tormenta por el caso de las tarjetas truchas y la pobrísima actividad parlamentaria, sufrirá un importante recambio de nombres y modificaciones en el esquema de poder, con la consolidación de La Libertad Avanza.
Es que, como analizó en detalle Diputados Bonaerenses, si este domingo se repitiesen los números de las elecciones PASO, en el Senado bonaerense Juntos por el Cambio (JxC) consolidaría un bloque de 23, quedándose con la primera minoría, Unión por la Patria (UxP) obtendría uno de 18 legisladores y La Libertad Avanza (LLA) armaría otro, de 5 integrantes.
Así, la principal novedad que pueden arrojar estos comicios en la Cámara alta bonaerense es que el armado libertario de Javier Milei, perforaría los pisos y estrenaría un bloque propio, por lo que rompería la hegemonía que vienen conservando UxP y JxC, que se reparten el recinto por mitades.
En tanto, siempre si los guarismos de este 22 de octubre son similares a los del 13 de agosto pasado, en la Cámara de Diputados bonaerense, JxC también se convertiría en la primer minoría, con un bloque de 41 legisladores, UxP en la segunda minoría con una bancada de 35 miembros y LLA con una estructura de 14 integrantes, siempre, contando que logre sumar a Nahuel Sotelo, Constanza Moragues y Guillermo Castello.
Similar al escenario que podría darse en el Senado, en la Cámara de Diputados bonaerense, la bancada libertaria dejaría de ser una expresión minoritaria, para entrar en la discusión del reparto de poder que protagonizan las dos fuerzas mayoritarias en el parlamento de la provincia de Buenos Aires, UxP y JxC.
En sintonía, a partir de estas elecciones 2023, en las que la Legislatura bonaerense renueva la mitad de su composición, 23 bancas en el Senado y 46 en la Cámara baja, habrá un importante recambio de nombres, dado que decenas de parlamentarios que no fueron candidatos ya tienen armadas las valijas para dejar sus escaños a partir del 11 de diciembre que viene. En efecto, habrá muchas caras nuevas en el próximo período parlamentario.
Los desafíos de la nueva Legislatura bonaerense
A partir de la reconfiguración del esquema de poder que dejen las elecciones de este domingo, en la Legislatura bonaerense se abrirán un conjunto de discusiones de relevancia política, como la definición de los nombres de los nuevos presidentes de ambas Cámaras, que podrían disputarse Sergio Massa y Javier Milei.
Asimismo, las fuerzas políticas mayoritarias, a las que probablemente se sume LLA, deberán resolver quiénes serán los presidentes y vices de bloque, nombres que deberán consensuar las diferentes fuerzas políticas que integran las coaliciones, con las consecuentes tensiones que esa tarea implica habitualmente.
Otro ítem que quedará para discutir ya con la nueva composición de la Legislatura bonaerense,que se verá reflejada recién en diciembre que viene, será la distribución de los cargos de las 47 comisiones permanentes de la Cámara de Diputados y las 27 del Senado.
Otro aspecto a destacar es que los nuevos legisladores, junto a los 23 senadores y los 46 diputados que tienen mandato hasta 2025, deberán encarar el siempre espinoso debate sobre el Presupuesto bonaerense 2024.
Por supuesto, también, luego del escándalo de las tarjetas de débito de la Legislatura bonaerense, conocido como el caso Julio “Chocolate” Rigau, la política provincial debiera encarar una urgente discusión sobre el manejo presupuestario de ambas Cámaras, sobre la necesidad de trasparentar la distribución de recursos, sobre los mecanismos de contralor administrativos y los bajísimos niveles de actividad parlamentaria.
En rigor, ese será el principal desafío de la ¿nueva? Legislatura bonaerense, que experimentará una reconfiguración de su esquema de poder.
(*) El autor es director del diario digital Diputados Bonaerenses.