En las últimas horas, el Gobierno nacional a cargo de Javier Milei anunció la baja del Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA) que funcionaba bajo la órbita de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), creado por el Ministerio de Economía en octubre del 2022, cuando la cartera se encontraba en manos de Sergio Massa.
De esta manera, el Gobierno de Milei, con la firma del secretario de Comercio, Pablo Agustín Lavigne, le dio paso a la liberación de las importaciones, y creó el Sistema Estadístico de Importaciones (SEDI), en reemplazo del SIRA, que establecerá un nuevo esquema de trabajo en la gestión económica liderada por Luis Caputo.
Según explica la resolución 5466/2023 publicada este miércoles en el Boletín Oficial, el SEDI funcionará como un registro en el cual deberán declararse las importaciones para luego ejecutarlas en un despacho, y de esta manera, se elimina la necesidad de aprobación por parte de la Secretaría de Comercio, lo que según la nueva administración nacional “generaba discrecionalidad”.
En el marco del anuncio de la liberación de las importaciones, el Gobierno nacional advirtió que en el transcurso de las próximas semanas sacará un manual de procedimientos para que los usuarios comprendan cómo será la utilización del SEDI, que tendría que ponerse en marcha de inmediato.
Así, el Gobierno nacional insiste en que la liberación de las importaciones le permite a cualquier persona ingresar productos desde el exterior a la Argentina sin la necesidad de aprobación por parte de ningún organismo. Mientras tanto, la gestión administrativa de Milei espera que “siga habiendo un monitoreo en las importaciones de distintos rubros para entender los patrones reales de las mismas”.
En esa misma línea, el Gobierno nacional señaló que el objetivo de observar los movimientos de las importaciones también tiene el fin de lograr un “tipo de cambio más razonable” en base a la cantidad de productos que ingresen durante el periodo de análisis. “Habrá un período de reacomodamiento, un gradualismo que durará menos que los gradualismos anteriores”, enfatizaron desde La Libertad Avanza.
De todas maneras, la forma de acceso a los dólares ya fue establecida por el Banco Central. Ya no habrá que tener conformidad previa para pagar las nuevas importaciones, sino que se estableció un sistema escalonado de acceso según el tipo de bien o servicio al que el usuario quiera acceder.
El mismo Banco Central impuso también un plazo de seis meses para los pagos de importaciones de automóviles. Para el resto de los bienes, los abonos podrán realizarse en cuatro cuotas. Esto es, un 25% desde los 30 días corridos, un 25% adicional desde los 60 días, otro 25% adicional desde los 90 días y el restante 25% desde los 120 días corridos.
Otro de los objetivos del Gobierno nacional es conocer a ciencia cierta cuánto es efectivamente la deuda comercial de los importadores y cuáles son las empresas afectadas. Se estima que las empresas tienen pasivos por más de 50.000 millones de dólares con sus proveedores o sus casas matrices.