Luego del reclamo de Padres Organizados sobre la situación que atraviesan varias escuelas de la provincia de Buenos Aires, diputados de Juntos salieron a pedirle al gobernador Axel Kicillof celeridad en el envío de fondos para mejorar la infraestructura en las instituciones educativas.
En medio de la llegada de la ola de frío al territorio bonaerense, con jornadas por debajo de 1 grado en varias de las localidades, fueron decenas las escuelas que tuvieron que suspender las clases por falta de calefacción o deficiencias edilicias.
Desde Padres Organizados reunieron las denuncias de las escuelas para elevar el reclamo al Gobierno bonaerense e instarlo a que se apuren tanto las obras como el depósito de dinero para que las empresas contratistas. “El frío es ahora y las clases se están perdiendo ahora”, se quejaron.
Como informó este medio, una de las localidades que este lunes tuvo que suspender clases en escuelas por la falta de calefacción fue Bahía Blanca. La diputada del GEN, Natalia Dziakowski, hace algunas semanas elevó un pedido de informes sobre este tema.
“Hay una demora circunstancial de la Dirección General de Cultura y Educación en hacer los pagos de las certificaciones de obra”, sostuvo la legisladora en diálogo con Diputados Bonaerenses.
“Algunas escuelas ya tienen medidor, y en otras el problema es que se abonó una parte y otra parte quedó pendiente, por lo que las certificaciones de obra no pueden continuar”, sostuvo Dziakowski, oriunda de Bahía Blanca.
En Bahía Blanca el Ejecutivo provincial abonó una parte del total de las certificaciones de obra por lo que algunos trabajos quedaron a la espera de la llegada de los fondos, mientras que el frío que comenzó a colarse entre las aulas hace varias semanas, ahora definitivamente, llegó para quedarse.
“Hoy tenemos unas cuantas escuelas que están sin gas en Bahía Blanca y hay otro montón que están en la misma situación en la provincia. Algunas tienen las clases suspendidas por falta de gas y otras que tienen horario reducido, donde los chicos que van a la mañana entran a una hora en la que hay sol y los que van a la tarde salen antes”, sostuvo la diputada del espacio de Margarita Stolbizer.
Asimismo, Dziakowski dijo que “el Consejo Escolar suministró caloventores a ciertas escuelas para paliar la situación, lo que en algunas pudo resolver la situación sin embargo en otras resultó imposible porque, por la cantidad que se necesitan, se revienta la térmica”.
Los docentes se van turnando los caloventores para poder dar clases en condiciones. “En algunas escuelas, a los docentes los hacen cumplir horario completo”, apuntó la diputada bahiense, haciendo alusión a la exposición a la bajas temperaturas.
“Me voy a comunicar con el Consejo Escolar de cada distrito para hacer una intimación”, adelantó Dziakowski sobre el nuevo pedido de informes que presentará en la Legislatura bonaerense para conocer la realidad de cada establecimiento educativo de la provincia.
Cabe señalar que, Padres Organizados relevó este lunes alrededor de 15 escuelas bonaerenses que tuvieron que suspender las clases o se encuentran abiertas en horario reducido por falta de gas, calefacción o mantenimiento.
Por su parte, la diputada radical y representante de la Cuarta sección, Vanesa Zuccari, precisó que “desde el consejo escolar mandaron notas a las escuelas del distrito para que cuando las chanchas de gas estuvieran en 40%, las escuelas pidieran el servicio a las empresas aunque varias no lo hicieron”.
Es preciso mencionar que, la mayoría de las instituciones del interior bonaerense utilizan gas licuado, por lo que la restitución del suministro depende del traslado de la empresa que lo comercializa. Otra de las dificultades con las que acarrean las instituciones educativas.
“En algunos casos puede ser que el problema no sea falta de mantenimiento sino por negligencia del responsable del establecimiento porque los consejeros escolares fueron antes de que empiecen las clases para prevenir que no se queden sin gas”, manifestó Zuccari a Diputados Bonaerenses.
No obstante, la legisladora provincial aclaró que “hay que indagar bien y ver qué tipo de gas va a las escuelas y cuál fue la última solicitud y, en caso de mantenimiento, el consejo escolar y las cooperadoras pueden trabajar para hacer algunas reformas”.
