jueves, marzo 28, 2024

Alberto Fernández anticipó que enviará al Congreso el proyecto de reforma judicial

El Presidente les pidió a los magistrados federales que “no vuelvan a usar la Justicia para resolver problemas políticos”.

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Alberto Fernández anticipó que en los próximos días enviará al Congreso Nacional el proyecto para reformar la justicia federal, pidió a los jueces que comprendan "que ellos no son parte de la discusión política" y reafirmó que su gestión seguirá defendiendo el respeto por las garantías del debido proceso.

"Lo que hace falta son jueces que actúen con dignidad y con seriedad", sostuvo el Presidente y reafirmó que en su Gobierno "no van a funcionar" determinadas "lógicas". "Les pido a los jueces que no vuelvan a hacer lo que hicieron; no usemos la justicia para resolver problemas políticos", dijo.

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Vale recordar que la reforma judicial fue anunciada con entusiasmo en su discurso legislativo del 1 de marzo y a mediados de mayo el tema volvió a instalar luego de que Fernández anunciara que el texto ya estaba redactado y que sería enviado al Congreso más temprano que tarde.

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“Tenemos listo el proyecto. Se intenta resolver el tema penal, fundamentalmente, el contencioso y administrativo y el tema civil y comercial federal. Se trata de ordenar el sistema y de terminar con esos espacios cerrados que le permitían a muy pocas personas manejar un poder enorme”, había señalado.

Por esos días trascendió que, uno de los ejes estará en poner en marcha el llamado sistema acusatorio, que le quita poder y protagonismo a los magistrados ya que la instrucción de los expedientes pasa centralmente a manos de los fiscales. Sin embargo, lo sustancial se concentrará en una reorganización de la justicia y en una redistribución de todo el sistema federal.

 

 

También, entre otras cosas, se mencionó que las causas ya no serán sorteadas sólo entre los jueces federales sino entre todos los jueces penales, lo que en la ciudad de Buenos Aires significa que entrarán en los sorteos de los expedientes sobre corrupción, no ya los 12 magistrados del edificio de Retiro, sino los 70 jueces penales.

Además, en varias oportunidades, el Presidente denunció el "lawfare" practicado con la "complacencia judicial y mediática con el poder político que posibilitó la persecución y detención arbitraria de opositores", durante la administración de Mauricio Macri.

Por su parte, Fernández también fue consultado sobre la causa de espionaje ilegal. "Veo con mucha preocupación que parece ser que se ha desbaratado una célula de espías que trabajaba con jueces y medios de comunicación, generando imputaciones falsas", consideró.

 

En esa línea, el Jefe de Estado seguró que "esas lógicas en la Argentina de hoy son intolerables" y "no pueden seguir ocurriendo" y planteó que, "si ese hecho fuera eventualmente cierto, hay que investigarlo garantizando todo el debido proceso que la República exige".

"Les garantizo que conmigo eso no va a funcionar nunca más; no voy a permitir que eso ocurra; algunos jueces tienen que entender que ellos no son parte de la discusión política, que son parte de la cuestión judicial", remarcó en una entrevista radial.

Sobre este punto graficó que los jueces "no tienen que estar todos los días en las tapas de los diarios", sino que "tienen que hacer justicia" y mencionó como “un ejemplo, el caso que se investiga en Dolores”. “Ninguno de nosotros le conocemos la cara a (juez Alejo) Ramos Padilla y miren cómo avanzó y no generó ni una sola foto de ningún imputado”, añadió.

 

 

Así trabaja la justicia; después sacará sus conclusiones, quién es inocente, quién es culpable; no quiero que se haga hoy lo que nosotros padecimos ayer", reflexionó. Por último, Fernández reiteró que los servicios de inteligencia "están para que el Estado haga inteligencia en defensa propia, no para investigar un periodista, un opositor, alguien que le cae poco simpático al Presidente o un hermano".

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