El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, pidió la renuncia del secretario de Articulación de Políticas Sociales, Gonzalo Calvo, quien autorizó la compra de azúcar y aceite a valores por encima de los "precios testigo" fijados por el Instituto Nacional de Alimentación (Sigen).
Se trata del primer resultado de la investigación interna que comenzó el Ministerio tras hablar con el presidente Alberto Fernández. Al mismo tiempo, Arroyo decidió avanzar con una revisión de los "circuitos administrativos".
Calvo, exsecretario de Seguridad de Almirante Brown, hombre cercano al intendente Mariano Cascallares, era el nexo entre los intendentes y el Ministerio de Desarrollo Social. "Fue el que avanzó con la compra", describieron cerca del ministro.
Ayer, el ministro de Desarrollo Social admitió haber ordenado compras de azúcar y aceite a precios más altos que los estipulados como "precios testigos", una decisión que recibió públicos cuestionamientos.
Asimismo, el funcionario explicó que "en ningún rubro se compró a una sola empresa porque se realizó una licitación para satisfacer la mayor demanda en los comedores, donde aumentó de 8 a 11 millones la cantidad de personas por el coronavirus”.
Incluso, en una entrevista televisiva, el presidente Alberto Fernández aseguró que creía en la "honestidad" de Arroyo y apuntó contra la "cartelización de ciertos sectores" que imponen precios ante la emergencia, para "llenarse los bolsillos".
En este sentido, el primer mandatario aseguró que la investigación del caso estaba abierta y advirtió que “no permitiré que el Estado compre alimentos a valores por encima de los precios de referencia”.