El jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, encabezó en forma virtual desde Villa la Angostura una reunión de emergencia para analizar la nueva filtración de chats del ministro de Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro, de la que participaron el jefe de Gabinete, Felipe Miguel, los secretarios Fernando Straface y Federico Di Benedetto, Silvia Lospennato, Diego Santilli y Christian Coelho.
En tanto, D’Alessandro no participó del encuentro virtual. El funcionario, que volvió a quedar en el ojo de la tormenta por segunda vez en menos de un mes, aseguró que es víctima de una “operación de inteligencia” y que los diálogos que se habrían filtrado de su teléfono celular “son falsos”.
Según informaron fuentes oficiales, Larreta determinó que por ahora no le pedirá la renuncia a D’Alessandro. Esta mañana habló por teléfono con el funcionario y lo habilitó a que dé explicaciones públicas sobre el tema. El ministro tiene agendadas entrevistas en canales de televisión para las próximas horas.
“Sería muy riesgoso tirar a un ministro por la ventana por una operación nefasta de inteligencia en el inicio de un año electoral. D’Alessandro dice que tiene pruebas para demostrar que los chats son falsos y nosotros le vamos a dar la posibilidad de que se defienda”, argumentaron desde el entorno de Larreta en medio del escándalo.
A principios de diciembre, tras una primera filtración del teléfono del ministro de Seguridad porteño, se conocieron chats de un grupo de Telegram vinculados a un viaje a Lago Escondido, a la estancia del magnate Joe Lewis, que derivó en una denuncia por los delitos de incumplimiento de lo deberes de funcionario público y dádivas.
En tanto, en las filtraciones conocidas ayer, hay conversaciones con distintas personas, entre ellas con Silvio Robles, vocero del presidente de la Corte, Horacio Rossati, con Silvia Majdalani, ex número dos de la AFI, y con Marcelo Violante, titular de Dakota, empresa de acarreo contratada por la Ciudad de Buenos Aires.
En cuanto al contenido de los nuevos chats que D’Alessandro mantiene con Robles, y que datan de noviembre pasado, el vocero de Rosatti le da argumentos para el conflicto que Juntos por el Cambio mantiene con el Frente de Todos sobre la integración del Consejo de la Magistratura.
Además, el vocero de Rosatti y D’Alessandro hacen referencia al “fallo Robles”. Así habrían bautizado los interlocutores al fallo de la Corte que se conocería el pasado 21 de diciembre y que terminaría inclinando la balanza a favor de la Ciudad de Buenos Aires en la disputa con la Casa Rosada por la coparticipación.
En cuanto a los diálogos que sostienen D’Alessandro y Violante, el empresario que maneja Dakota, la concesionaria de las grúas y las playas de estacionamiento de Buenos Aires, se trata de intercambios producidos en 2019 y 2020. Entre otras cosas, Violante le pregunta al ministro porteño si le “da para proponerle negocios a Horacio”, en supuesta referencia a Larreta.
Por otra parte, también hay intercambios de mensajes entre D’Alessandro y Majdalani, ex subdirectora de la Agencia Federal de Inteligencia, coordinando distintas acciones. Entre otras cosas, Majdalani, que llama “pendex” al ministro porteño, le sugiere “no poner el cuerpito cuando pasan las balas”.
La difusión de los chats de D’Alessandro provocaron fuertes críticas del oficialismo. Los legisladores del Frente de Todos consideraron “el caos institucional tiene nombre y apellido: Horacio Rosatti”, hablaron de “perniciosos vínculos” y de “arreglo de fallos entre Silvio Robles, vocero de Horacio Rosatti” y D’Alessandro.
Por su parte, los diputados del Frente de Todos también se expresaron en un comunicado de tono similar, titulado “D’Alessandro es Larreta, Robles es Rosatti”. Allí, afirmaron que “los nuevos chats revelan un entramado mafioso y delictivo”, al tiempo que calificaron como “escandaloso” el contenido de los mensajes.
