En lo que es el último paso para presentar el Presupuesto 2023 ante el Concejo Deliberante de General Pueyrredón, la secretaría económica le llevó una propuesta al intendente Guillermo Montenegro (PRO) para que la actualización de las tasas municipales sea del 60%, con una “cláusula gatillo” por inflación.
No obstante, luego de dos horas de reunión con su Gabinete económico, Montenegro se mostró reacio a aplicar esa fórmula. El intendente de Mar del Plata busca elevar la ordenanza fiscal e impositiva con un número cerrado, atendiendo a la realidad de un año donde se jugará su permanencia al frente del Ejecutivo local.
En concreto, el secretario de Hacienda de Mar del Plata, Germán Blanco, presentó a Montenegro una propuesta que están impulsando muchos municipios de la provincia de Buenos Aires, que es fijar el aumento de tasas en línea con la inflación planteada por el gobierno nacional en el Presupuesto 2023.
Asimismo, el secretario de Hacienda le sumó una cláusula de actualización automática para que no ocurra lo mismo que lo planteado para este año, donde la pauta de incremento de tasas quedó desfasada con respecto a la evolución de la inflación.
Según precisaron desde el Ejecutivo de Mar del Plata, Montenegro pidió que “se analicen otras alternativas”, pese a que el secretario de Hacienda insistió en que lo más conveniente era aplicar una cláusula gatillo. Todavía el alcalde marplatense no tomó una definición al respecto.
Cabe destacar que, el Concejo Deliberante de Mar del Plata emitió un decreto a través del cual prorrogó hasta el 30 de noviembre la presentación del Presupuesto 2023, que fue avalado por el conjunto de los bloques políticos.
Ante este panorama, los funcionarios de la secretaría de Hacienda de Mar del Plata tenían previsto reunirse con Montenegro para definir el porcentaje de aumento de tasas y el lunes poder elevar el proyecto de Presupuesto 2023 y la ordenanza fiscal impositiva al Concejo Deliberante local.
Los principales dilemas que se le presentan a Montenegro a la hora de considerar la clausula gatillo para la actualización de las tasas es que, en caso de que la inflación nacional supere el 60%, aumentarán considerablemente en un año electoral, y los trabajadores municipales reclamarían el mismo método para la suba de salarios.
