El Sindicato de Trabajadores Municipales de Mar del Plata (STM) este martes anunció que monitorearán a los funcionarios del intendente PRO, Guillermo Montenegro, para saber si cumplen con su jornada laboral, en respuesta a los dichos del jefe comunal sobre descontarles los días a los empleados estatales que no se presenten a trabajar por adherirse a los paros.
“Los funcionarios foráneos y más cercanos al intendente son los que más cobran y menos trabajan. Con el ahorro ayudaremos a arreglar la Municipalidad o tapar los baches de nuestra ciudad”, señalaron los municipales de Mar del Plata.
En ese sentido, las autoridades del gremio que nuclea a los municipales de Mar del Plata le pidió a los delegados que informen los horarios de entrada y de salida, los días de ausentismo y el motivo, las licencias, la cantidad de días y el decreto o resolución que se la otorgó.
Cabe destacar que, la postura de los municipales de Mar del Plata llega después de que el intendente Montenegro nuevamente rechazara las medidas de fuerzas gremiales para exigir un aumento salarial, y que advirtiera que “el que va a laburar cobrará y el que no labura no cobrará”.
“Bajo ninguna circunstancia voy a rifar el orden en las cuentas públicas porque es la plata de los vecinos. Detesto la irresponsabilidad de los que tiran a la marchanta la plata de los vecinos, especulando con que aumenta los impuestos y listo”, fustigó Montenegro, lo que causó el enojo de los municipales de Mar del Plata.

Vale recordar que, si bien a principios de junio luego de varios meses de desacuerdos hubo reuniones entre el gobierno de Montenegro y los municipales de Mar del Plata para concretar un aumento salarial, la semana pasada los estatales rechazaron la propuesta que elevó la intendencia para otorgarles un incremento del 13% a pagarse con los salarios de julio y agosto, es decir, del 6,5% por cada mes.
De esta manera, los representantes de los municipales de Mar del Plata convocaron a un encuentro entre la comisión directiva y el cuerpo de delegados del Ministerio de Trabajo de Nación, con el objetivo de exigir una propuesta superadora a la de Montenegro y recomponer la pérdida del poder adquisitivo de los últimos meses.
Ahora, los municipales de Mar del Plata retomaron la senda de medidas de fuerzas al monitorear si los funcionarios de Montenegro cumplen con las jornadas laborales, en el marco de una pelea que hoy está muy lejos de terminar, y que mantiene en vilo a la ciudad cabecera de la Quinta sección.
La historia de la pelea entre los municipales de Mar del Plata y Montenegro
Es preciso recordar que, los municipales de Mar del Plata y el gobierno de Montenegro mantuvieron en los últimos meses una serie de desencuentros debido a la falta de acuerdo paritario. Pese a que hubo varias instancias de diálogo, los estatales exigían un 35% de incremento mientras que los representantes del Ejecutivo les ofrecieron un 10%.
Ante la negativa de ambas partes de ceder, Montenegro decretó el aumento con la oferta del 10% del Ejecutivo, lo que causó el enojó del gremio de los municipales de Mar del Plata que denunciaron un incumplimiento por parte del alcalde y que anunciaron un “plan de lucha a matar o morir”.
En ese sentido, Montenegro realizó varios contraataques a los municipales de Mar del Plata. En primer lugar, le descontó los días a los estatales que participaron del paro de 48 horas producido a finales del pasado abril; y luego presentó un proyecto en el Concejo Deliberante para que sean considerados “esenciales“, con el fin de bloquear cualquier tipo de medida de fuerza que implique la interrupción o suspensión del trabajo.
Aún cuando el proyecto de Montenegro para frenar paros no avanzó en el Concejo Deliberante, debido a que el oficialismo de la comisión de Ambiente decidió postergar su tratamiento, el texto parlamentario caló muy hondo en los municipales de Mar del Plata que lo tomaron como una declaración de guerra que, si bien en un momento se amagó con frenarla, proseguirá hasta que se concrete de una vez por todas un acuerdo salarial.