En las últimas horas, el Gobierno nacional de Javier Milei adelantó que el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, trabaja para poner en práctica una serie de desregulaciones en el mercado inmobiliario que impactarán de manera directa en los precios y las ofertas de alquileres en todo el país.
Es preciso mencionar que, para avanzar con las desregulaciones en el mercado inmobiliario, Sturzenegger visitó la Casa Rosada para reunirse con el Presidente. Sin embargo, el jefe de Estado también pasó por las oficinas del Ministerio ubicado en Roque Sáenz Peña al 788, a pocos metros de la sede gubernamental.
Si bien aún no hay una fecha precisa para el decreto que incluirá las modificaciones para el sector inmobiliario, el Gobierno prevé que podría concretarse en los próximos 45 días, aunque aún restan definir los detalles específicos sobre las medidas que se implementarán este año.
Es que, en principio, la administración libertaria tiene pensado poner el foco en que ya no sea obligatorio estar colegiado para ofrecer servicios inmobiliarios, y que existan nuevos agentes dedicados a la actividad a los que se les exija una capacitación pero no la colegiación obligatoria.
La idea, según explicaron fuentes que transitan la Casa Rosada a diario, consiste en que estas nuevas modalidades del mercado inmobiliario convivan con los colegios profesionales tradicionales, con el objetivo de que “existan diferentes opciones en el mercado”.
Sin embargo, desde la cartera que lidera Sturzenegger, hicieron especial hincapié en que las desregulaciones en el mercado inmobiliario no contemplan, en ningún caso, la eliminación de los colegios, sino que deje de ser obligatorio pertenecer a ellos para poder dedicarse a la intermediación inmobiliaria.
De esta manera, con la reforma en estudio, el Gobierno busca incentivar la competencia y reducir costos para compradores y vendedores, mientras que en el sector inmobiliario, el debate se centra en el impacto que podría tener una desregulación de las normativas vigentes.
Es que, según manifiestan los representantes del mercado inmobiliario, la actividad funcionó históricamente con distintas regulaciones, pero la tecnología y los cambios en el comportamiento de los consumidores modificaron las dinámicas comerciales.
Plataformas digitales y agentes independientes ganaron protagonismo, de hecho es famosa la guerra de inmobiliarias entre los colegios y Re/Max, y desafiaron el esquema tradicional. Ahora, la pregunta clave es cómo responderá el mercado inmobiliario ante una eventual apertura, y qué impacto tendrá en la seguridad jurídica y la calidad del servicio.
El Gobierno planea desregulaciones en el mercado inmobiliario: las voces a favor y en contra
Por su parte, Iván Ginevra, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, sostuvo que es válido cuestionar el rol de los colegios inmobiliarios en el país, ya que varios están administrados por “burócratas con un perfil político” que, en lugar de acompañar la evolución del sector, “se dedican a perseguir a las inmobiliarias para cobrarles”.
En tanto, Mariano García Malbrán, presidente de la Cámara de Empresas de Servicios Inmobiliarios (CAMESI), expresó su apoyo a la desregulación del sector inmobiliario, afirmó que “reducir trámites burocráticos y costos mejoraría el mercado”, y señaló que medidas con orientación desreguladora, como la derogación de la Ley de Alquileres, demostraron “efectos positivos” en la actividad.
En ese sentido, García Malbrán criticó a los colegios inmobiliarios por cobrar altas sumas a los corredores sin ofrecer servicios de valor a cambio. “La colegiación debería ser voluntaria y que estas instituciones tengan que atraer a los profesionales con beneficios reales, en lugar de obligarlos a afiliarse sin brindarles mejoras significativas”, sintetizó.
En paralelo, la presidenta de la Federación Inmobiliaria de la República Argentina (FIRA), Josefina Pantano, rechazó la intención del Gobierno de desregular el mercado inmobiliario y defendió el actual sistema de matriculación.
“Argentina está posicionada a nivel latinoamericano como uno de los países más profesionalizados y ordenados en materia de corretaje inmobiliario. Nuestro sistema permite asegurar la competencia entre todos los profesionales por igual, evita monopolios que perjudiquen la diversidad de la oferta y demanda”, afirmó Pantano.
En esa línea, la titular de la FIRA sostuvo que la capacitación de los actores que participan del mercado inmobiliario, tanto inquilinos como propietarios, es clave para la innovación y la protección del consumidor, ya que previene fraudes, engaños y desinformación, y destacó que los Colegios Profesionales cumplen un rol esencial, ya que alivian la carga administrativa del Estado sin generar costos para el gasto público.
“Suprimir entidades que suman en la cadena de valor y en la mejora continua del mercado inmobiliario no solo es innecesario, sino que representa un retroceso en la búsqueda del equilibrio y la competencia dentro del sector”, advirtió la presidenta de la FIRA.
En última instancia, Alejandro Moretti, miembro del Colegio Inmobiliario porteño, afirmó que en el sector aún no hay certezas sobre los alcances de las posibles desregulaciones. “Estoy en contacto con más de 60 o 70 colegas de distintos ámbitos, incluso de otras provincias, y la verdad es que no sabemos bien de qué se trata”, expresó.
En tanto, Moretti señaló que el mercado inmobiliario atraviesa un momento de alta actividad, con un récord en la cantidad de escrituras y operaciones de alquiler, y cuestionó la necesidad de cambios que busca implementar la administración de Milei: “No sé por qué el Gobierno quiere modificar algo que hoy funciona bien tras más de cinco años de crisis”, sintetizó.
