Frente a la nueva prórroga del Presupuesto 2023 por parte del Gobierno nacional de Javier Milei y la incertidumbre económica que enfrentan las universidades, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) emitió un comunicado en el que se expresa la inquietud respecto al funcionamiento de las casas de estudio en 2025, y piden una reunión “urgente” con las autoridades de la administración libertaria.
Es preciso mencionar que, en línea con la insistencia de las autoridades de las universidades nacionales para concretar un encuentro con el Gobierno, los gremios docentes y no docentes de todas las casas de estudio anunciaron un paro de 48 horas en reclamo de mejoras salariales y mayor financiamiento.
Es que, los rectores de las universidades nacionales denunciaron que el presupuesto para el funcionamiento de las instituciones se mantiene congelado y apenas cubre el 50% de las necesidades previstas para el 2025. En tanto, la falta de actualización de los recursos pone en riesgo el desarrollo académico y administrativo de las casas de estudio.
A los reclamos presupuestarios se suman otros problemas, como la paralización de obras de infraestructura, la reducción drástica de fondos para el sistema de investigación y la falta de actualización de las becas estudiantiles, que permanecen congeladas desde agosto de 2024. Además, las paritarias salariales están estancadas, lo que agrava aún más el conflicto con los trabajadores del sector.

Ante esta situación, el CIN solicitó una reunión urgente con las autoridades del Gobierno nacional para generar alternativas de solución. En su comunicado titulado “Nuevo año, los mismos problemas”, los rectores señalaron que la crisis presupuestaria impacta directamente en el acceso a la educación superior y en el desarrollo del conocimiento.
“Tenemos la convicción de que debe primar el diálogo y el consenso. Consideramos imprescindible la unidad nacional por sobre la cultura de la provocación y el conflicto, para construir un proyecto de país independiente y solidario”, manifestaron todos los integrantes del CIN en el comunicado.
Mientras el CIN busca una instancia de negociación, el Frente Sindical de las Universidades Nacionales ratificó su plan de lucha y anunció un paro de 48 horas a partir del lunes, con una medida afectará el normal desarrollo de clases y actividades administrativas en las universidades de todo el país.
En conferencia de prensa, el secretario de Organización del gremio Federación Nacional de Docentes Universitarios (CONADU), Federico Montero, criticó la falta de respuestas por parte del Gobierno nacional y aseguró que el congelamiento presupuestario y salarial forma parte de una política de ajuste que perjudica a las universidades y a los trabajadores.
“Esto se suma a una serie de medidas que son parte de un gigantesco proceso de transferencia de ingresos de los sectores populares hacia el capital concentrado del país”, afirmó el integrante de la CONADU, que es una de los principales sindicatos que convocaron el paro de 48 horas para el próximo lunes 17 y martes 18 de marzo.
Así, el conflicto universitario continúa en escalada y, ante la ausencia de soluciones concretas, las casas de estudio y los gremios endurecen sus reclamos. La comunidad académica espera que el Gobierno nacional acceda al pedido de diálogo y que adopten medidas urgentes para garantizar el funcionamiento del sistema universitario en el 2025.
Sin presupuesto, ¿las universidades podrían volver a convocar una marcha federal?
Cabe señalar que, el escenario de crisis que enfrentan las universidades nacionales este 2025 recuerda lo ocurrido en 2024, cuando miles de estudiantes, docentes y autoridades académicas salieron a las calles en dos oportunidades en el marco de la Marcha Federal Universitaria para reclamar mayor financiamiento y denunciar el ajuste presupuestario.
Las movilizaciones, que tuvieron su epicentro en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, también contaron con réplicas en distintas provincias, y dejó en evidencia la preocupación generalizada que existe en la sociedad argentina por la defensa de la educación pública superior, una de las mas grandes conquistas de los trabajadores.


En tanto, las dos masivas movilizaciones fueron impulsadas por el CIN, junto con sindicatos y federaciones estudiantiles. Uno de los principales reclamos fue la actualización de los fondos para el funcionamiento de las universidades, ya que el presupuesto aprobado para 2023 se mantuvo congelado sin ajustes por inflación, lo que generó un ahogo financiero en las instituciones.
Al mismo tiempo, los gremios que nuclean a los docentes y no docentes universitarios exigieron la reapertura de paritarias y mejoras salariales, mientras que los estudiantes denunciaron el recorte de becas y la paralización de obras de infraestructura.
Ante la falta de respuestas por parte del Gobierno nacional, la comunidad universitaria mostró una fuerte unidad en defensa de la educación pública y gratuita. La masividad de las protestas fue interpretada como un mensaje claro a la administración libertaria, que se vio presionada a abrir canales de diálogo.
Ahora, con un 2025 que se perfila igual o peor en términos presupuestarios, las universidades y gremios advierten que, si no hay soluciones concretas, la historia podría repetirse con nuevas marchas en defensa del sistema universitario.