Este martes, en el Pasaje Dardo Rocha de La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires, el gobernador bonarense, Axel Kicillof, le tomó juramento al intendente electo de dicha ciudad, Julio Alak, que, entre lágrimas, confesó que se debe “reconvertir el municipio” producto de los años de abandono en los que lleva inmerso.
“Dejamos la administración 3.800 agentes municipales y el salario más alto, hoy esa planta asciende a casi 12 mil agentes, de los cuales 6.500 fueron designados en los últimos cuatro años y 1.500 durante este 2023. Lo que es grave es que las escalas salariales son las peores de toda la provincia de Buenos Aires”, señaló Alak al comienzo de su alocución.
En ese contexto, el flamante intendente de La Plata se refirió a las dificultades con las que se encontró al comenzar la transición con el jefe comunal saliente, Julio Garro, y consideró que la ciudad “tiene que ingresar otra vez a la senda del progreso social”, al tiempo que aclaró que los platenses cuentan con el apoyo del Gobernador para encarar el proyecto de reconversión.
En esta línea, el Intendente de La Plata informó que “la planificación urbana va a ser prioridad”, también sostuvo que se va a promover una “ciudad socialmente integrada”, que se trabajará en localidades que están “aisladas” y en espacios verdes que se encuentran en “mal estado” y que se pavimentarán las 7.500 cuadras que faltan. “Nos inspira el legado de los fundadores”, manifestó.
“La ciudad necesita sueños, utopías y levantar el autoestima. Hay mucho por hacer, los convoco a todos, sin distinción de partidos políticos”, pregonó Alak y agregó: “La Plata debe volver a ser un potente polo productivo”.
Asimismo, el flamante Intendente de La Plata resaltó la importancia de que el Gobierno nacional respete la coparticipación de la provincia de Buenos Aires y anunció que se acoplarán al reclamo de la restitución de los puntos que le pertenece al distrito gobernado por Kicillof.
En este sentido, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, que fue habilitado para tomar juramento por el flamante presidente del Honorable Concejo Deliberante de La Plata, Marcelo Galland, coincidió con Alak al señalar que acompañará el proceso de reconstrucción de la ciudad.
“Vamos a recuperar el orgullo de la capital de la provincia de Buenos Aires, va a ser un lugar de referencia y un faro para todo el territorio”, señaló Kicillof, que también destacó la campaña de Alak en La Plata y aseguró que es un “orgullo, como vecino de la ciudad, como militante y como gobernador” reelecto que otra vez haya un intendente peronista.
“La Plata neceistaba un proyecto producto, soberano e inclusivo, de ahora en más va a recuperar su orgullo y resplendor”, indicó el Gobernador en el Pasaje Dardo Rocha y confesó que se había prometido a sí mismo que no entraría al emblemático edificio hasta que no haya un intendente peronista. En ese sentido, el emblemático edificio se vio colmado de militantes y se destacó por la puesta en escena ordenada.
“Julio Alak ha sido un inmenso Ministro de Justicia para la provincia de Buenos Aires, y hoy debemos reconocer que perdimos un gran Ministro pero ganamos un inmenso intendente de La Plata”, concluyó Kicillof.
Entre los invitados que participaron del acto de asunción de Julio Alak a la intendencia de La Plata, estuvieron el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Alejandro Dichiara, su vice, Carlos “Cuto” Moreno, y la legisladora de la provincia de Buenos Aires, Lucía Iañes, estos últimos dos dirigentes cercanos a Kicillof y Cristina Kirchner