El bloque de senadores bonaerenses del Frente de Todos se plegó al rechazo de todo el arco oficialista al nombramiento del juez Horacio Rosatti como presidente del Consejo de la Magistratura.
En este sentido, los senadores del Frente de Todos en la Legislatura bonaerense indicaron que la resolución de la Corte Suprema de declarar inconstitucional la conformación del Consejo de la Magistratura “viola la independencia de poderes” y “otorga a la Corte, y a su presidente en particular, un poder que excede a su rol constitucional”.
De esta manera, el bloque de legisladores oficialistas pidió a la Corte Suprema que “en un gesto de responsabilidad institucional, otorgue al Congreso de la Nación un plazo razonable para sancionar una nueva ley del Consejo de la Magistratura”.
Es preciso mencionar que, el tratamiento de la reforma del Consejo de la Magistratura se da luego de que, en diciembre pasado, la Corte Suprema de Justicia declarara inconstitucional los cambios aprobados por el Congreso en el 2006 propuestos por Cristina Kirchner y estableciera un plazo de 120 días, que venció el viernes pasado, para sancionar una nueva norma.
En este contexto, el oficialismo presentó un proyecto, que eleva a 17 los miembros del Congreso y, luego del tratamiento en el Senado, incorporó el concepto de “Regiones Federales”. El mismo obtuvo la media sanción, pero no llegó a ser tratado en la Cámara baja antes de la fecha límite dispuesta por el máximo tribunal.
En consecuencia, la Corte Suprema de Justicia resolvió que el titular del máximo tribunal, Horacio Rosatti, se haga cargo de la presidencia del Consejo de la Magistratura y que el organismo continúe funcionando “de manera inmediata”.
“Después de demorar el expediente por 6 años y 1.577 días para estudiar la constitucionalidad de la conformación del Consejo de la Magistratura, la Corte le otorgó al Congreso un plazo irrisorio de 120 días para sancionar una nueva ley”, manifestaron los senadores bonaerenses.
Asimismo, desde el bloque de legisladores del Frente de Todos en la Cámara alta expresaron que “cumplido dicho plazo, y en vez de prorrogar el pedido para que el congreso arribe a los consensos necesarios, la Corte optó por restablecer la ley derogada en 2006 y provocar una enorme gravedad institucional”.
El reclamo de los senadores bonaerenses del Frente de Todos se suma al de los diputados nacionales que ayer exigieron a la Corte Suprema “que arbitre los mecanismos necesarios para otorgar un plazo de 90 días al Congreso”, con el objetivo de completar el tratamiento del proyecto de reforma del Consejo de la Magistratura que ya tiene media sanción del Senado.
Para los diputados del Frente de Todos, “hay una alternativa para encauzar institucionalmente el tema, la Corte Suprema de Justicia tiene la posibilidad de generar las condiciones pata hacerla realidad” a la vez que consideraron que la designación de Rosatti se trata de un “golpe institucional”.
