Luego de los anuncios del presidente entrante Javier Milei respecto de la quita de subsidios al transporte público con el objetivo de lograr un equilibrio fiscal el próximo año, las empresas de colectivos agrupadas en la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (FATAP) reclamaron por transferencias impagas por parte del Gobierno nacional y amenazaron con paralizar el servicio si el conflicto no se resuelve a la brevedad.
“Resulta inminente la paralización paulatina de los servicios por falta de recursos para hacer frente a los compromisos salariales”, escribieron las autoridades de la FATAP en un comunicado publicado en las últimas horas, que advierte que las medidas adoptadas por el Gobierno nacional “afectaron los precios del combustible a costos mayoristas que en el interior se abonan a $1.000 por litro”.
En esa misma línea, los empresas de colectivos remarcaron que, frente a la falta de subsidios y a la tardanza de las transferencias impagas de diciembre, deben avanzar con una “reestructuración de los servicios hasta lograr medidas que permitan la sustentabilidad del transporte”. “En consecuencia, se anuncia la reducción de servicios a los mínimos operativos indispensables, y la suspensión de los servicios nocturnos desde las 21:30 horas hasta el primer matutino”.
En consonancia con los reclamos por las transferencias de los subsidios impagos, la FATAP hizo especial hincapié en que sus autoridades persistirán en el “diálogo y la búsqueda de soluciones, pero no demorarán en adoptar medidas, por drásticas y dolorosas que las mismas puedan llegar a ser, con el fin de salvaguardar la existencia de sus afiliadas y los puestos de trabajo que generan”.
Según explicaron las empresas de colectivos que advirtieron sobre un posible paro general del transporte, la deuda del Gobierno nacional asciende a los $2.500 millones, y debería haberse pagado el cuarto día hábil de diciembre. En tanto, el Ministerio de Transporte no restituyó un saldo al que se había comprometido en el acuerdo paritario de noviembre, que según las autoridades de la FATAP es “imprescindible” para pagar los aguinaldos.
Por su parte, la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) publicó su Índice Bondi. Se trata de un cálculo de cuánto cuesta mantener el sistema de transporte público en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) en función de los gastos fijos que las empresas de colectivos enfrentan, como salarios y combustible.
En diciembre, luego de que el nuevo ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo anunciara la quita de subsidios en el marco del nuevo paquete de medidas junto con la suba de la nafta, el Índice Bondi ascendió a los $187.978 millones. En este contexto, según la AAETA, un boleto valdría 797 pesos.
Por ahora no se conocieron mayores detalles sobre el nuevo esquema tarifario, ya que la quita de subsidios no se implementó como tal, y según las palabras de los propios funcionarios de Milei, llegarían recién con el inicio de enero. Hasta tanto, el valor del boleto de colectivo será un interrogante. Sin embargo, las empresas concesionarias ya advirtieron que estará por encima de los $500.
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