Más de una docena de intendentes del PRO almuerzan en La Plata, con el alcalde de la capital bonaerense Julio Garro como anfitrión, para llegar a un puñados de acuerdos respecto a la discusión del Presupuesto 2023 que Axel Kicillof giró a la Legislatura bonaerense, a las elecciones 2023 en los distritos y la tónica que tendrá el cierre de año.
“Van a analizar el cierre de año, el presupuesto de Provincia y como se encara el próximo año en los municipios. Viene la gran mayoría, aunque por temas de agenda algunos no podrán llegar”, confiaron desde el entorno de Garro a Diputados Bonaerenses y evitaron relevar la locación que albergará la rosca de los aldaldes amarillos.
La elección del lugar y del anfitrión no es casual, dado que Garro fue el jefe comunal que representó a sus pares del PRO en la primera reunión de negociación que abrió el jefe de Gabinete, Martín Insaurralde, el jueves al mediodía en la Gobernación de La Plata, por el Presupuesto 2023. Como es sabido, los intendentes tienen peso propio en los entendimientos y siempre juegan su partido por fondos, recursos y obras.
Incluso, fue Garro quien le puso números al pedido de los intendentes del PRO. El jefe comunal reclamó que se incorporen unos $82 mil millones al Presupuesto de Kicillof, de los cuales unos $50 mil millones quieren que se destinen al Fondo de Infraestructura Municipal (FIM) 2023 y los otros $32 mil millones para el Fondo de Seguridad. Además, planteó el reclamo para que a comienzos del año que viene el Gobierno bonaerense adelante el 50% de las partidas del FIM 2023.
Sin embargo, Garro ligó el avance de la discusión más fina a que el Poder Ejecutivo cancele las deudas que arrastra en concepto de desembolsos del FIM vigente, del Fondo de Seguridad en curso, prestaciones del IOMA, del IPS y de diferentes créditos leasing. En esa dirección, el alcalde platense también dejó sentado que buscan una compensación por los efectos de la inflación en los montos previstos para el FIM 2022, de alrededor de $4.800 millones.
“Le pudimos explicar que la decisión es atar la aprobación del Presupuesto al cumplimiento previo de obligaciones contraídas. Una vez con eso, empezaremos a puntear. También queremos que haya una compensación del FIM 2021 con el 2022, dado que en su momento se otorgó con un 36% proyectado en inflación y hoy estamos en un 90%: eso da un reajuste de 4.800 millones para municipios de Juntos y 5.200 para los del Frente de Todos”, explicó ayer Julio Garro.
La celeridad es uno de los ítems que preocupa a los jefes comunales de Juntos. “Es necesario que se termine la burocracia administrativa que demora la ejecución de obras. Los retrasos del FIM 2021 afectaron a todos los municipios porque la inflación se terminó comiendo entre un 50 y 60% de las obras previstas. Ahora pedimos que haya un adelanto del 50% del FIM 2023 al comienzo de año y después 4 cuotas fijas que queden ya establecidas”, completó Garro.
