El primer ministro británico, Boris Johnson, anunció en las últimas horas el envío de misiles antitanques y antiaéreos a Ucrania tras el ataque ruso a una estación de tren, en el marco del conflicto que inició hace un mes y medio. Tras la ayuda de los ingleses, el país gobernado por Vladímir Putin reprochó la medida y le pidió a la comunidad internacional que dejara de suministrar armas a Kiev.
“Los crímenes de Rusia en Ucrania no quedarán impunes“, sostuvo Johnson, al anunciar la entrega de material militar que consta de un valor de 100 millones de libras (130 millones de dólares), que incluye misiles antiaéreos Starstreak y otros dispositivos antitanques. Asimismo, el primer ministro británico contó que las islas intentan “ayudar a la gente que viene de Ucrania“, al referirse a los esfuerzos para acoger a los refugiados que huyen de la guerra.
Cabe aclarar que, el primer ministro británico comunicó la entrega de armamento a Ucrania luego del encuentro con el canciller alemán, Olaf Scholz, quien calificó de “atroz” el ataque a la estación de Kramatorsk. En este sentido, Johnson sostuvo que las agresiones en la terminal de tren muestran “la oscuridad en que está sumido el otrora reputado ejército de Vladimir Putin“.
“Reino Unido y Alemania comparten exactamente el mismo sentimiento de horror y repulsión ante la brutalidad que se está desatando, incluido el inconcebible bombardeo de refugiados que huían de sus hogares esta mañana”, agregó Johnson en una conferencia de prensa realizada en las últimas horas junto al canciller alemán.
En el evento, el primer ministro británico también aseguró que “es un crimen de guerra atacar indiscriminadamente a los civiles”. Fue así que, Johnson puntualizó junto a Scholz, tras las agresiones en la estación de tren de la localidad de Kramatorsk, que “los crímenes de Rusia en Ucrania no pasarán desapercibidos ni quedarán impunes”.
En contraste, y luego de que Inglaterra decidiera enviar equipamiento militar al territorio invadido por el país gobernado por Vladímir Putin, el Ministerio de Exteriores de Rusia llamó a la comunidad internacional “a evaluar de manera imparcial los crímenes de las formaciones ucranianas, dejar de suministrarles armas y alentar a Kiev a abandonar métodos de guerra inadmisibles”.
A partir de la postura de los rusos, quienes fueron suspendidos del Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Cancillería del país que invadió Ucrania hace un mes y medio dijo que las autoridades de Kiev “no podrán eludir su responsabilidad” respecto a la guerra que tiene en vilo al mundo y que provocó problemas económicos en varios países, como es el caso de Alemania, que obtenía combustible fósil de Rusia como fuente de energía.
“Somos bastante optimistas de que nos libraremos muy pronto de la necesidad de importar gas de Rusia“, refirió Scholz en la conferencia de prensa que realizó junto al primer ministro británico, a fin de eliminar todo tipo de vínculo económico con el país que agrede a Ucrania desde el 24 de febrero de este año.
Es importante saber que, los jefes de Gobierno británico y alemán se reunieron mientras la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, visitaban Ucrania, tras los destrozos de la estación ferroviaria de Kramatorsk.
