Bajo el argumento de “reacomodamiento interno del área”, la Corte Suprema de Justicia desplazó por decisión de Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda, este jueves, a su administrador general, Hector Marchi, quien llevaba más de 15 años en el cargo.
En tanto, el quinto integrante de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti presentó en duros términos su disidencia frente al desplazamiento de su hombre, Hector Marchi, administrador general del Máximo Tribunal.
Es que, el desplazamiento pone de manifiesto el enfrentamiento entre los jueces tras la elaboración de un informe que envió Marchi a la Comisión de Juicio político de la Cámara de Diputados, donde daba cuenta de las irregularidades detectadas en el funcionamiento de la obra social del Poder Judicial.
En concreto, las denuncias sobre las irregularidades en la administración de la obra social del Poder Judicial que alcanzan a todos los integrantes de la Corte Suprema, es uno de los temas por los cuales se está llevando adelante el proceso de enjuiciamiento contra los magistrados del Máximo Tribunal.
Sin embargo, fuentes de la Corte Suprema aseguraron que la decisión de desplazar a Marchi estaba tomada desde antes de sus presentaciones de las últimas semanas, el informe vinculado a la obra social así como también la recusación de los cuatro jueces en una causa judicial.
“Es evidente que no hay razones administrativas para disponer este traslado, la prueba de ello es que se designa en su reemplazo a un secretario civil que no tiene ninguna experiencia en la administración, para desplazar a un funcionario que hace 15 años que se desempeña con el aval de todos los Ministros y sin objeciones”, argumentó Lorenzetti tras el desplazo de Marchi como administrador general.
También, Lorenzetti manifestó que “el enojo lleva a la irresponsabilidad institucional con grave perjuicio para el Poder Judicial”. “El apartamiento de Marchi es, en realidad, una sanción porque ha presentado un informe sobre la Obra Social, de fecha 19 de abril, que no parece gustar”, advirtió.
Vale mencionar que, en su acordada de hoy la Corte Suprema decidió separar el área de auditoría del área de administración para “dotar de mayor especialidad y autonomía funcional al órgano encargado de realizar el control contable, financiero y de gestión de la superintendencia que desarrolla como cabeza del Poder Judicial”.
En detalle, la Corte Suprema creó la Dirección de Control Interno y Auditoría que reportará al pleno de los jueces del tribunal para darle autonomía funcional de la con respecto a las áreas controladas por la administración general.
Además, la Corte Suprema en el reacomodamiento del área que termino con el desplazamiento de Marchi activó una Secretaria Jurídica General, una Dirección de Sumarios y otra de Asuntos Contenciosos.
Asimismo, la Corte Suprema dispuso que la Mesa General de Entradas y la Dirección de Despacho, que actualmente dependen de la Dirección Jurídica General y de la Secretaría General de Administración, se desempeñen en la órbita de la Secretaría Jurídica General.
Vale recordar que, Marchi era el administrador general de la Corte Suprema, cargo al que llegó de la mano de Lorenzett, sobrevivió a los cambios de presidentes del Máximo Tribunal y a las embestidas de Elisa Carrió, quien lo denunció penalmente.
Por ese entonces, cuando asumió Rosenkrantz como presidente de la Corte Suprema, se buscó desplazar a Marchi pero en esa ocasión los votos no acompañaron la decisión. Sin embargo, hoy ocurrió lo contrario y solo su amigo Lorenzetti lo respaldó.
