En las últimas horas, el titular de la Unión General de Asociación de Trabajadores del Transporte (UGATT), Omar Maturano, salió a blanquear la pelea que mantiene con el cosecretario general de la CGT, Pablo Moyano, por el proyecto de ley que busca regular a las apps de delivery y se debate en la Cámara de Diputados bonaerense.
En ese sentido, Maturano disparó directo contra el autor de la iniciativa, titular del sindicato de canillitas y aliado de Pablo Moyano, el senador bonaerense Omar Plaini, aunque se cuidó de no mencionarlo.
“La UGATT no aceptará que gremios que no pertenecen ni de cerca a la actividad, como los canillitas o los pasteleros, presenten proyectos de ley sin siquiera haber tenido comunicación con quienes pedalean a diario para llevar el pan a su casa“, disparó Maturano.
Tanto Pablo Moyano y Omar Maturano están pujando por quedarse con la representación sindical de los repartidores en la provincia de Buenos, que serían más de 50 mil. En efecto, el registro que plantea el proyecto de ley de deliverys sería el primer paso para la sindicalización de los empleados que se mueven por el territorio bonaerense.
Según afirmaron desde la conducción de la UGATT, están dispuestos a respaldar “las iniciativas en las comisiones pertinentes”, aunque aclararon que “las mesas son grandes y amplias para que se siente quien corresponda, pero sin presentar proyectos por la ventana”.
Maturano, quién además es el secretario general de La Fraternidad, exaltó el trabajo que realiza Mauro López, titular de la Asociación Sindical de Repartidores Independientes (ASRI), con propuestas vinculadas a la ley de deliverys.
En esa línea, el sindicalista sostuvo que 800 empleados de la actividad ya representados en La Plata y otros distritos linderos requieren ser parte de “la discusión de los proyectos de ley presentados para ofrecer soluciones a la totalidad del personal” del sector.
Cabe destacar que, Maturano incluyó a la ASRI dentro de la UGATT, una agrupación creada en 2013 durante el gobierno de Cristina Kirchner para oponerse a la Confederación de Trabajadores del Transporte (CATT) que manejaban los Moyano.
Entre los repartidores de app de deliverys se empezaron a articular armados sindicales, entre los que se uncuentra la Asociación Sindical de Motociclistas Mensajeros y Servicios (ASIMM), que conduce Marcelo Pariente, y que responde a Pablo Moyano.
Ambos estuvieron presentes en la conferencia de prensa que brindaron los legisladores del Frente de Todos en apoyo a la ley de delivery, frente al rechazo que tuvo por parte de los legisladores de Juntos y del sector de los libertarios.
“Es urgente ordenar de forma legal la actividad de los repartidores de delivery de empresas de plataformas, que en muchos casos son extranjeras y no tributan en el país, y de esos trabajadores que, a diario, arriesgan su físico a partir de la precarización”, concluyó Maturano.
Ley de deliverys: de qué trata el proyecto
La propuesta para regular las apps de delivery, que ya tiene media sanción del Senado bonaerense, establece en su segundo artículo la creación de un registro obligatorio de trabajadores de las aplicaciones. En tanto, en sus artículos sexto y séptimo, aclara que se “otorgará un certificado habilitante para el repartidor y su medio de movilidad”.
Debido a ese registro obligatorio de trabajadores, empresas de deliverys como Rappi, Pedidos Ya y/o Uber Eats tendrán que inscribir una vez por año a sus “empleados” y a los vehículos que utilizan para repartir los encargos, por los cuales el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires les expedirá esos certificados habilitantes.
En esa línea, el presidente del bloque de diputados del Frente de Todos, César Valicenti, adelantó que desde la próxima semana abrirán una ronda de debate en el plenario conjunto de las comisiones de Presupuesto, Trabajo, Asuntos Constitucionales y Legislación General para escuchar a los sectores afectados por el proyecto de ley que regula las apps de delivery.
“Ya se hizo la sesión conjunta de las comisiones, en la que se escuchó la posición de los diferentes espacios políticos, y ahora tiene que venir una serie de encuentros para escuchar los trabajadores organizados, a los empleados no sindicalizados y también a los empleados de los empresarios”, enfatizó Valicenti.
