Este jueves comenzó el tramo final del juicio por Lucía Pérez, la adolescente de 16 años asesinada el 8 de octubre de 2016, jornada en la que se escucharon los alegatos del fiscal Leandro Arévalo, quien pidió al Tribunal Oral N°2 de Mar del Plata que se condene con prisión perpetua al principal acusado del femicidio, Matías Farías, de 29 años.
En su exposición, que duró más de dos horas, Arévalo consideró que Farías es autor del delito de “abuso sexual con acceso carnal agravado por la muerte, por el suministro de estupefacientes y en el contexto de violencia de género en concurso con femicidio”.
De esta manera, el fiscal expuso en su alegato que Farías ya presumía abusar sexualmente de Lucía Pérez desde el momento en que le vendió drogas en la puerta de la escuela el día anterior al 8 de octubre. Además, remarcó la participación de Juan Pablo Offidani, de 47 años, por el que Arévalo pidió la pena de 20 años de prisión.
Ambos acusados están detenidos desde 2018, después de que el TOC 1 de Mar del Plata los declarara culpables únicamente por el delito de venta de drogas agravado por ser en la puerta de un colegio. En tanto al asesinato de Lucía Pérez, el tribunal absolvió a Farías y Offidani, motivo por el cual se abrió un juicio político contra los letrados a cargo.
Es por esto que, el fiscal les pidió a los jueces Gustavo Fissore, Roberto Falcone y Alexis Simaz, que a la hora de dictar sentencia lo hagan “con perspectiva de género”, que exige “percibir la intención de los distintos géneros con sus fuerzas y debilidades”.
De esta manera, Arévalo considera necesaria esta mirada de género porque permite “analizar en perspectiva cómo se encuentran uno y otro en interacción”. “¿Cómo vamos a hablar que son iguales una persona que tiene 16 años con una de 23?”, remarcó.
Es por esto que, el fiscal explicó que, como Lucía Pérez era consumidora, tampoco estaba en igualdad de condiciones a Farías para dar un ‘consentimiento’ para tener relaciones sexuales. Además, Arévalo argumentó que “él era acreedor, uno bastante particular, le había fiado, lo que no es una práctica habitual que hace el vendedor de drogas”.
El alegato continuó con la descripción del fiscal sobre unos mensajes de whatsapp que intercambiaron Lucía Pérez y el acusado Matías Farías, en los que él le insiste y ella evade. “A las 8.27 am Lucía le propone pagarle, él la invita a la casa y ella le pone que está bien, hasta acá Lucía iba a pagar pero Farías tenía otro plan pergeñado”, apuntó.
De esta manera, el argumento del letrado continuó con la explicación del agravante de la cocaína que Farías le dio a Lucía Pérez para quebrantar su voluntad y abusarla, que se constató que la sustancia en su poder era del 92% de pureza.
“Hubo de todo menos consentimiento”, dijo el fiscal, y explicó que al haber consumido cocaína en exceso, Lucía Pérez no estaba en condiciones de decir que no quería estar con él y que “no necesariamente tiene que haber signos de abuso o violencia para que haya habido abuso”.
Respecto al otro acusado, Juan Pablo Offidani, Arévalo consideró que su rol en el femicidio de Lucía Pérez fue importante pero no necesario, por lo que pidió 20 años de prisión. “Sabía lo que iba a hacer, y tengo para mí que él esperaba sumarse, como voyeurista, como aplaudidor, Farías era el semental y él lo vanagloriaba”, señaló.
Las defensas alegarán, por su parte, el martes 28, mientras tratarán de cuestionar la existencia del delito, mientras que ambos imputados tendrán la posibilidad de brindar sus últimas palabras antes de que los jueces fallen en el juicio por Lucía Pérez.
