Desde Italia, mientras representa a Argentina en el mundial de Bridge, el expresidente Mauricio Macri se subió a la discusión sobre el proyecto de redes sociales que el Gobierno nacional anunció ayer para fomentar el “buen uso” de las plataformas.
Al igual que su par del PRO, Horacio Rodríguez Larreta, Macri dijo que está en contra de cualquier intento de “limitar, regular, afectar, influir o condicionar, en cualquier forma, nuestro derecho a expresarnos libremente dentro de los artículos de la Constitución”.
“No concibo que la democracia sea posible regulando las expresiones en las plataformas o en los medios de comunicación”, aseguró el exmandatario desde el viejo continente, a través de una carta publicada en sus redes sociales.
El expresidente publicó este mediodía la misiva en la que se definió como un “absolutista de la libertad de expresión” y admitió que, a diferencia del presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner, “nunca” bloqueó a un usuario en Twitter.
Es esa misma línea, el líder del PRO que, gracias a la autorización del juez de la causa por el espionaje ilegal pudo viajar a Italia para participar del Mundial de Bridge, advirtió que todo limite en las plataforma que no esté contemplado en la Constitución es “es censura o vigilancia”.
En ese sentido, Macri dijo que la polémica sobre la libertad de expresión en las redes que se produjo luego del “desafortunado anuncio que hizo el gobierno, al declarar que trabaja en un ´pacto para el buen uso de redes sociales´ para que ´dejen de intoxicar el espíritu de nuestra democracia’”.
Luego de criticar la regulación de los medios de comunicación de la gestión de Cristina Kirchner, las cuales eliminó ni bien asumió la presidencia, Macri volvió a criticar la actitud de los funcionarios oficialistas al decir que “consta el bloqueo a usuarios, los insultos y el desprecio a las ideas”.
No obstante, para diferenciarse aún más de la postura oficialista, el expresidente se comparó con el empresario multimillonario Elon Musk, quien hace poco declaró ser “un absolutista de la libertad de expresión”, después de que se negó a bloquear la señal de los medios de comunicación a Rusia.
“Yo también soy un absolutista de la libertad de expresión. Por eso, si es necesario, lucharé junto a todos ustedes para que nadie se meta con lo queremos decir, cómo podemos decirlo, ni dónde tenemos permitido hacerlo”, dijo Macri al sentar su posición sobre el proyecto de redes sociales .
La polémica se abrió ayer luego de que el secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia y titular del Consejo Económico y Social, Gustavo Beliz, señalara que el Gobierno trabaja en un estudio sobre las redes sociales para proponer “un pacto” de “buen uso”.
En este sentido, el funcionario nacional anticipó que convocaron a “40 universidades de la Argentina para pensar y proponer iniciativas” a la vez que indicó que están trabajando “con un estudio pionero que marca y propone un pacto para el buen uso de las redes sociales”.
Luego del anuncio, los líderes de Juntos por el Cambio se expresaron en contra del proyecto anunciado por Beliz y lo acusaron de atentar contra la libertad de expresión y las pautas democráticas en las que el país está inscripto.
