Las comisiones internas del gremio La Bancaria de una decena de municipios, entre ellos varios de los más poblados del interior de la provincia de Buenos Aires, admitieron que el proyecto de reforma del Bapro se encuentra “empantanado” en la Legislatura bonaerense, salieron a meter presión y responsabilizaron a María Eugenia Vidal y a Cristian Ritondo de querer “demoler” los derechos de los empleados del Banco Provincia.
La carta que hizo circular La Bancaria sobre la reforma del Bapro está firmada por las comisiones internas de las sucursales de Azul, Bahía Blanca, Buenos Aires, Chascomús, Chivilcoy, Pehuajó, Junín, La Plata, Mar del Plata, Necochea, Pergamino, Tandil y Viedma, muchas de las cuales, como relevó este medio hace algunas semanas, ya vienen contactando a legisladores en territorio con el objeto de acelerar el tratamiento.
En ese contexto, varios de los diputados bonaerenses de Juntos que cultivan una buena relación con los trabajadores del Banco Provincia en sus distritos, manifestaron que el rechazo del proyecto que lleva la firma de Axel Kicillof podría generar “incomodidades” en territorio. Con este registro presente, integrantes de las comisiones internas de La Bancaria sondearon a varios legisladores del interior bonaerense.
“Trabajamos para desbloquear este nuevo intento de Vidal y sus sucesores, como Ritondo, de destruir o privatizar el Banco Provincia. Quieren demoler derechos adquiridos no sólo de los trabajadores, sino también del Instituto de Previsión Social (IPS), desconociendo la letra de la Constitución y demostrando que están contra del Estado de derecho”, sostuvieron las comisiones internas sobre la reforma del Bapro.
Los trabajadores de la banca pública bonaerense remarcaron en su carta abierta que “Ritondo ha salido desembozadamente a evitar que se modifiquen los que son incuestionablemente inconstitucionales, como así también los que suprimen contenidos discriminatorios para la mujer trabajadora, y los lesivos para el Banco de la Provincia de Buenos Aires“.
Las comisiones internas de La Bancaria recordaron que la reforma del Bapro obtuvo aprobación en “las respectivas comisiones de la Cámara de Diputados bonaerense para que se corrijan los artículos cuestionados por la Justicia y los que nos agravian, pero está empantanado su tratamiento debido a una acción antidemocrática del PRO“.
Reforma Bapro: cuándo se podría tratar
Como publicó Diputados Bonaerenses, en la sesión de la Cámara baja previa al receso invernal, el Frente de Todos no logró los consensos necesarios con la oposición mayoritaria de Juntos para introducir en el temario la reforma del Bapro y sólo se aprobaron unos cuantos cargos que estaban pendientes.
Por lo pronto, el proyecto de reforma del Bapro quedará pendiente para los primeros días de agosto, cuanto terminen las “vacaciones de invierno” en la Legislatura bonaerense. El oficialismo extendió en tres oportunidades la fecha para tratar la iniciativa de Kicillof y La Bancaria. Ahora la intención del Frente de Todos es llevarla al recinto “cuanto antes”.
Pese a la voluntad en los referentes legislativos del oficialismo no está clara cuál será la estrategia que abrirá las puertas del recinto, ni tampoco la fecha estimativa. El peronismo en principio necesita reunir qoúrum y, posteriormente, lograr un empate en la votación o superar en número a la oposición de Juntos.
Respecto este último punto entre legisladores opositores circuló la versión de una posible “libertad de acción“, que en el PRO desestiman de plano. Los legisladores amarillos se abroquelaron en el rechazo cerrado al proyecto de reforma del Bapro de Kicillof como parte de un mandato acordado en la mesa nacional de la jefatura porteña.
Reforma del Bapro: La Bancaria a la carga
La semana pasada el titular de La Bancaria, Sergio Palazzo, que ya tiene prometida la reforma del Bapro por Kicillof, se reunió con el jefe de Gabinete Martín Insaurralde, una de sus manos derechas, el presidente de la Cámara de Diputados, Federico Otermín, la jefa de bloque del FdT en el Senado bonaerense, María Teresa García, y el diputado Mariano Cascallares.
“Con el secretario general de La Bancaria, Sergio Palazzo, conversamos sobre el proyecto de ley para recuperar los derechos de las y los jubilados de Banco Provincia. Es muy importante el tratamiento para proteger la caja previsional de la banca pública bonaerense”, publicó Insaurralde en sus redes sociales después del encuentro.
En la reunión de Palazzo con Insaurralde y las espadas legislativas del Frente de Todos, entre las que no estuvo la vicegobernadora Verónica Magario, se conversó sobre la urgencia de garantizar la media sanción de la reforma del Bapro y de las estrategias parlamentarias que exploran.
Reforma del Bapro: las claves del proyecto
El proyecto que ya tienen dictamen de mayoría en la Cámara de Diputados busca modificar el régimen de la Caja de Jubilaciones, Subsidios y Pensiones del Personal del Bapro, que fue acordado con el titular del gremio Asociación Bancaria, Sergio Palazzo.
La iniciativa oficialista define la jubilación por edad avanzada con menores requisitos previsionales, el restablecimiento de la edad jubilatoria para las mujeres que trabajan en el Banco Provincia a partir de los 60 años, dado que en la actualidad se jubilan a los 65, y la paridad de género en la Caja.
El proyecto busca devolver a los jubilados del Bapro el 82%, pero sobre el cálculo del promedio actualizado de las últimas 120 remuneraciones, y aumentar el aporte de los trabajadores activos del 14% a 16%, de los jubilados del 10,82% a 12% y de la patronal del 21% a 29%.
Si bien los cambios que impulsa Kicillof mantienen algunos de los recortes que logró Vidal en la Legislatura bonaerense durante 2017, cumpliría con el pedido de la Suprema Corte bonaerense de darle “una definición política” al conflicto judicial que generó la reforma de la exgobernadora.
Durante el gobierno de Vidal se sancionó la ley 15.008, que elevó a 65 los años de jubilación para hombres y mujeres, y estableció el haber en un 75% de lo que cobra el personal en actividad, en lugar del 82% que regía, bajo el argumento de que ese sistema llevaba a la caja a una situación deficitaria.
