Familiares, amigos y vecinos participaron esta mañana del velatorio de los restos de Lucas González, el adolescente asesinado por policías de la Ciudad de Buenos Aires el miércoles último en Barracas, en una cochería del partido de Florencio Varela, antes inhumarlos en el cementerio Parque Iraola, de Hudson.
Minutos antes de las 10, salieron junto al coche fúnebre con el féretro de Lucas González rumbo al cementerio, tras permanecer desde primera hora de esta mañana en la sala velatoria Colonial, situada en la ruta 36 al 1200, en la zona sur del Gran Buenos Aires.
Mario “Peka” González y Cintia López, los padres de Lucas González, llegaron bien temprano a la sala velatoria Colonial y luego abordaron el coche fúnebre que llevo el cuerpo del joven al cementerio de Hudson.
Rodeados de otros familiares, amigos y vecinos que los acompañan con carteles y banderas, los padres de Lucas González se enfrentan a un clima de dolor en el que cosechan muestras de apoyo y reclaman justicia.
Afuera de la sala donde velaron los restos de Lucas González, más de 100 personas permanecían agrupadas, mientras que del lado de adentro también estuvieron los tres menores sobrevivientes que viajaban con el joven asesinado.
Pasadas las 9, un grupo grande de amigos y conocidos del adolescente asesinado llego en un micro de línea, con remeras que llevaban la leyenda de justicia por Lucas González.
El velatorio continuará hasta el mediodía, cuando el féretro será trasladado hasta el cementerio de Hudson, donde los restos de Lucas González serán inhumados para darles el último adiós.
El velatorio comenzó cerca de las 19 de ayer, tras la finalización de la autopsia, cuando Cintia López, la mamá de Lucas González, sufrió una descompensación dentro de la sala por la que fue asistida por personal médico.
Hasta las 20 de ayer se planificó una ceremonia reservada a los familiares más cercanos de Lucas González, para luego abrir la sala permitiendo el acceso a los amigos.
Esa espera en el exterior de la cochería generó escenas de mucho dolor, con grupos de adolescentes consolándose entre sí y luego organizándose para ingresar. El velatorio fue interrumpido cerca de las 23 de anoche y continúa hoy desde las 8.