Este jueves, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, se reencontrará con el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, en la localidad bonaerense de Ensenada con motivo del anuncio de la construcción del Canal de Magdalena. La reunión, significará el fin de casi 50 días de distanciamiento entre dos de las principales caras del oficialismo.
En ese sentido, Alberto Fernández y Kicillof participarán de un acto, que se desarrollará a las 11 horas en el Puerto La Plata, en el que anunciarán la licitación para realizar el Canal de Magdalena, que permitirá que los buques puedan acceder a aguas profundas sin tener que bordear la costa de Uruguay.
Con esta construcción, los Gobiernos nacional y bonaerense buscan que la Provincia pueda exportar en barco de una forma mucho más eficiente y que se facilite la conexión con más de 40 puertos del Río de La Plata, Paraná y la Costa Atlántica.
Vale recordar que, durante el discurso que abrió las sesiones ordinarias de la Legislatura bonaerense, Kicillof definió el Canal Magdalena como una obra “estratégica para el país y la provincia, pero también para la soberanía”.
“Nos va a permitir una salida al mar y garantizar la conexión de la Cuenca del Plata con la Antártida sin injerencia exterior. Esta obra viene a resolver problemas que se traen desde los inicios de la Revolución de Mayo, y si no se realizó antes es porque existen intereses privados que lo impiden“, puntualizó el Gobernador bonaerense.
El acto en Ensenada, también signficará el reencuentro de los mandatarios, dado que la relación entre Kicillof y Alberto Fernández está congelada. Las visibles tensiones internas que transita el Frente de Todos por no poder consensuar una estrategia electoral, a casi sesenta días para el cierre de listas, terminaron por dinamitar un vínculo que ya venía tambaleando.
El rigor, la última vez que se mostraron juntos el jefe de Estado y el Gobernador bonaerense fue el 28 de febrero, cuando ambos anunciaron el Colector Cloacal Morón Sur Morón. Allí, Alberto Fernández había dejado una frase que avivó más la interna oficialista: “No importa quién presidirá el país en diciembre, sí que sea de los nuestros”.
A pesar de haber compartido la mesa política del Frente de Todos a finales de febrero, la cual fue un débil puntapié del oficialismo para poder diagramar una plataforma electoral en conjunto, ni Alberto Fernández ni Axel Kicillof supieron encontrar puntos en común en sus planteos para las elecciones primarias.
A pesar de que no confirmó que buscará una reelección, Alberto Fernández sigue insistiendo en magnificar el concepto de unas PASO competitivas en el Frente de Todos, pensamiento que le está significando una pérdida de aliados políticos dentro del espacio que, teóricamente, lidera.
Por su parte, Kicillof demostró en reiteradas ocasiones que está del otro lado de la vereda: se muestra al frente del operativo clamor para que la actual vicepresidenta, Cristina Kirchner, sea la única candidata presidencial del oficialismo.
Hace tan solo algunos días, el Gobernador bonaerense encabezó una marcha a Tribunales, convocada por el kirchnerismo, en protesta por la situación judicial de la exmandataria. Bajo el lema de “romper la proscripción”, Axel Kicillof volvió a clamar por la candidatura de Cristina Kirchner.
Cabe destacar, que este reclamo se basa en la sentencia de la Causa Vialidad, en la que está involucrada Cristina Kirchner y que busca inhabilitarla de los cargos públicos. “Si Cristina quiere, el pueblo la va a acompañar y Cristina va a volver a ejercer cargos”, dijo en ese acto Kicillof, a contramano de lo que postula Alberto Fernández.