viernes, diciembre 6, 2024

Alertan sobre la invasión de mosquitos en el AMBA

El aumento de mosquitos que se registró en el AMBA es una invasión de la especie conocida como “mosquitos de inundación”.

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El aumento de mosquitos que se registró en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) en las últimas semanas es una invasión de la especie Aedes albifasciatus mejor conocida como, “mosquitos de inundación”, este es famoso por la transmisión del virus de la Encefalitis Equina del oeste (EEO), que actualmente presenta un brote en los caballos y según especialistas la picadura es más “letal y dolorosa”.

La directora del Grupo de Estudio de Mosquitos de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (FCEN) de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Sylvia Fischer afirmó: “Hay abundancia de una especie que llamamos mosquitos de inundación por el tipo de estrategia y ciclo de vida que tiene”.

En este sentido, la directora informó que este mosquito se caracteriza por ser silvestre y se distribuye prácticamente en toda la Argentina, incluso es tolerante a las bajas temperaturas y llega hasta Tierra del Fuego.

Además, Fischer destacó que las hembras ponen los huevos en lugares que se pueden anegar cuando llueve, donde se forman charcos temporarios de distintos tamaños, por lo que en épocas de mucha lluvia, todos los huevos acumulados en lugares que se inundan eclosionan casi simultáneamente y generan el desarrollo sincrónico de millones de mosquitos.

Lo grave de este mosquito es lo que trasmite, es por eso que Fischer explicó la clase de virus: “Generalmente diría que la picadura del Aedes albifasciatus es inofensiva, pero en este momento estamos teniendo un brote de EEO en caballos a nivel de la zona centro y norte de nuestro país, aunque afecta principalmente a caballos también puede ser contraída, sintomáticamente o no, por seres humanos”.

Asimismo, la directora explicó los síntomas que genera la picadura del mosquito es más dolorosa que la del dengue, al tiempo que informó que la “mayoría de los casos son asintomáticos o se presentan como cuadros leves con fiebre, cansancio, dolores musculares y malestar general que se resuelven espontáneamente entre siete y diez días”.

En rigor, Fischer recomendó que para evitar la picadura de este tipo de mosquitos se lleven a cabo las mismas medidas de prevención que las que se conocen contra el Aedes Aegypti, es decir que se deben eliminar todos los recipientes que puedan acumular agua; cambiar diariamente el contenido de los bebedores de animales, macetas y floreros; vaciar regularmente los recolectores de los aires acondicionados; y mantener los patios y jardines limpios, ordenados y desmalezados.

En este contexto, ante las sugerencias del Ministerio de Salud, Fischer agregó que se debe utilizar repelente y en caso de estar en lugares al aire libre, sobre todo en espacios verdes, se debe llevar remera manga larga y pantalón largo para cubrir gran parte del cuerpo.

Si bien, la directora alertó a la sociedad de cómo reaccionar ante este caso, también afirmó que esta invasión no durara mucho en el tiempo ya que, “esta especie tiene una longevidad que no es tan larga y una mortalidad bastante importante como todos los mosquitos“, aclaró.

“Muy rápidamente estos picos bajan en una semana, diez días, o dos semanas, excepto que siga habiendo episodios de lluvias muy intensa aún en ese caso, no deberían ser las mismas cantidades que hay ahora porque este pico tiene que ver con muchos huevos acumulados esperando a que se anegue el terreno”, finalizó Fischer.

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