Con la exposición de asociaciones de inquilinos y de corredores inmobiliarios, la comisión de Legislación General de la Cámara de Diputados continuará este martes con la ronda de consultas sobre la reforma a la Ley de Alquileres, que está centrada en la extensión de contratos y su actualización.
Si bien el objetivo acordado entre las bancadas parlamentarias era comenzar hoy con el debate parlamentario, el viernes último las autoridades de la comisión, conducida por la legisladora Cecilia Moreau, decidieron realizar otra jornada de consultas con los sectores involucrados en este mercado.
En tanto, una vez concluidas las reuniones informativas donde expondrán las asociaciones de entidades de inquilinos, de martilleros, cámaras inmobiliarias y miembros de Defensa del Consumidor, comenzará el debate interno entre los diputados.
De esta manera, es poco probable que en el transcurso de esta semana se firme el dictamen de comisión, puesto que los legisladores podrían estirar ese plazo hasta la primera semana de mayo, debido a que existen muchas diferencias entre los 27 proyectos presentados por los diputados de diferentes fuerzas políticas.
Con relación a la reforma a la actual Ley de Alquileres, los principales puntos que se discuten son reducir el contrato mínimo de tres a dos años; la actualización de un año a seis meses; y evaluar algún cambio en el mecanismo para calcular esos ajustes que hoy se establecen en base a la inflación y al aumento salarial promedio.
En ese sentido, una de las discrepancias que hubo en la jornada de expositores de la semana pasada, fue cuando el titular del Colegio de Corredores Inmobiliarios, Andrés Gariboldi, insistió en reducir el plazo del contrato de 36 a 24 meses, con el fin de generar “incentivos para que haya inversiones en inmuebles para que ingresen al mercado locativo”.
Las Palabras de Gariboldi fueron en respuesta a la exposición Magali Zirulnikoff, miembro de la Comunidad Federal Inquilina y No Propietaria, quien había señalado la necesidad de sostener el período de alquiler de tres años, dado que “las poblaciones inquilinas ya no pueden seguir sosteniendo mudanzas cada dos años”.
Según precisaron fuentes parlamentarias, hay diferentes posturas tanto en el Frente de Todos donde hay legisladores que coinciden con las asociaciones de inquilinos en no modificar la actual Ley de Alquileres, mientras que otros buscan introducir cambios porque sostienen que se debe ayudar a mejorar la oferta de viviendas para alquilar.
Tampoco hay una postura única en Juntos por el Cambio donde los sectores reconocidos como “los halcones” del PRO quieren la derogación de la Ley de Alquileres y que el mercado se regule por el Código Civil y Comercial, mientras que la mayoría se pronuncia por volver a los contratos de dos años y una actualización semestral.
Vale recordar, que los legisladores del Frente de Todos y de Juntos por el Cambio acordaron en los primeros días de abril analizar durante 30 días hábiles las reformas que se deben efectuar a la Ley de Alquileres sancionada en 2020, con el fin de aprobar una nueva iniciativa en la primera quincena de mayo.
