A menos de 48 horas de que se cumpla el plazo establecido para las sesiones extraordinarias del Congreso, el Gobierno nacional avanza con nuevas negociaciones que podrían concluir en la eliminación de nuevos artículos para llevar la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, conocida como ley ómnibus, al recinto de Diputados.
Según confirmaron fuentes parlamentarias, el oficialismo decidió posponer la sesión en la Cámara baja, que estaba prevista en principio para el martes, para el miércoles 31 de enero, con el objetivo de avanzar las negociaciones con los bloques “dialoguistas” sobre el tratamiento en particular del articulado de la ley ómnibus.
Para garantizar el quórum, el Gobierno concedería reducir reducir de once a siete las facultades delegadas al residente Javier Milei, así como quitar la transferencia de activos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) al Tesoro, uno de los principales cambios de la oposición.
Es preciso mencionar que, desde que la Ley Ómnibus ingresó al Congreso, sufrió cientos de cambios, especialmente en los capítulos que referían a las reformas económicas y tributarias, que fueron quitadas por el propio Gobierno nacional. En este marco, el objetivo de Javier Milei y sus ministros es negociar hasta último momento con los legisladores dialoguistas, para lograr la media sanción del proyecto el próximo miércoles
En este sentido, el Gobierno nacional necesita que la Ley Ómnibus logre la media sanción, ya que la prioridad actual de todo el gabinete de Milei está puesta sobre la idea de enviar “una buena señal” a los mercados y al Fondo Monetario Internacional (FMI) para afianzar la confianza de los mismos en la gestión libertaria que asumió hace poco menos de dos meses.
Con conversaciones que perduraron durante todo el fin de semana, la Unión Cívica Radical (UCR), el Pro y Hacemos Coalición Federal esperan una respuesta formal a los pedidos de modificaciones planteadas después de una semana de intensos vaivenes para lograr un dictamen de mayoría. Si bien se descuenta que la iniciativa sea aprobada en general por el aval de este mosaico de legisladores, el foco estará puesto en cómo se llegará a la votación en particular de cada uno de los puntos de la iniciativa.
Por su parte, los sectores del peronismo y kirchnerismo que responden a Unión por la Patria y la izquierda, se encaminan a un rechazo total de la Ley Ómnibus, ya que consideran que la quita del capítulo fiscal anunciada el pasado viernes por el ministro de Economía, Luis Caputo, fue una “trampa” para que los dialoguistas avancen en nuevas negociaciones.
En este contexto, y frente a la serie de confusiones que se generaron tras la conferencia de Caputo, el vocero presidencial, Manuel Adorni, ratificó durante la rueda de prensa que brinda habitualmente que la vuelta del impuesto a las Ganancias quedó fuera del proyecto de Ley Ómnibus ya que estaba dentro del paquete de medidas económicas que el Gobierno nacional decidió retirar.
“Había algunas dudas sobre lo que iba a pasar con la ley de ingresos personales, lo que se conoce popularmente como el impuesto a las Ganancias. Desde el Gobierno nacional queremos advertir que también se retiró del debate de la Ley Ómnibus ya que está dentro del paquete de modificaciones en el área económica”, informó Adorni.
Sin embargo, la letra chica de la cancelación de la vuelta del impuesto a las Ganancias contiene un revés económico para las provincias, ya que trae bajo el brazo un recorte en el presupuesto que se envía desde el Estado nacional hacia las comunas. “Vamos a ajustar partidas que no estaban contempladas y que entendíamos que no era la mejor alternativa, pero estaba dentro las opciones que teníamos para actuar”, puntualizó Adorni bajo los argumentos de que el Gobierno aún persiste en lograr el déficit cero a corto plazo.
Por orden de la Casa Rosada, en la reunión de Labor Parlamentaria, que el oficialismo intentará convocar para este martes, el bloque de La Libertad Avanza propondrá incluir un párrafo para dejar expresamente definido que quedarán afuera las facultades en materia previsional y fiscal.
Si esa reunión llegara a salir como el Gobierno nacional la planificó, Milei lograría retener los poderes especiales en las áreas económica, financiera, de seguridad, de salud, tarifaria, energética y administrativa por un año, prorrogable por el Congreso por un año más.
“Se quejaban de estos dos temas, decían que tenían dudas, ahora se los vamos a dejar por escrito. Veremos si ahora apoyan la ley ómnibus”, comentaron fuentes del oficialismo, que en la Cámara baja tiene a su titular, Martín Menem, como intermediario entre los tomadores de decisiones del Poder Ejecutivo y los bloques de la oposición aliada.
A pesar de que todos reconocen la capacidad de diálogo de Menem, muchos legisladores oficialistas muestran fastidio ante la falta de interlocutores que definan situaciones. “Nos mandan funcionarios de segundas líneas que no tienen la última palabra y eso demora todo el proceso”, afirman los diputados que dedicaron las últimas semanas a puntear uno por uno los asuntos objetados.
En medio de ese modus operandi, las bancadas dialoguistas esperan aún la contrapropuesta con modificaciones que el Gobierno nacional se había comprometido a otorgar antes del sábado. Acostumbrados a los tiempos del oficialismo, un referente radical aseguraba que la Ley Ómnibus a tratar “tiene que llegar este mismo lunes”.
Con una reunión de bloque prevista para este lunes a la tarde-noche, la UCR espera una respuesta para definir su posición de cara a la votación final. A pesar de su objetivo de mostrarse cohesionados, un sector referenciado al diputado Facundo Manes y al que podría sumarse la media docena que responde al eje de Martín Lousteau y Emiliano Yacobitti, seguía con la idea de no acompañar el proyecto en general. “Lo más probable es que se abstengan para no votar idéntico al kirchnerismo”, analizan en el recinto.
Ante este escenario, la cumbre radical apuntaría a amalgamar la votación en particular en la que, según trascendió, todos coinciden en no conceder a Milei el capítulo de privatizaciones ni en la transferencia de los activos del Fondo de Garantías de Sustentabilidad (FGS) al Tesoro, además de temas puntuales sobre la definición de lo que se considera una manifestación o los cambios en materia de legítima defensa.
Desde el radicalismo, temen que los libertarios, en consonancia con la oposición intransigente, apuren el tratamiento y solo habiliten la aprobación -o rechazo- de la iniciativa en general. “Los moderados quedarían en una encerrona”, sintetizaron desde el bloque que aún no definió una posición frente a la ley ómnibus.
Desde el ala Pro, por su parte, ya manifestaron su intención de apoyar el proyecto en general, aunque enviaron algunas “mejoras” en temas de “forma y de técnica legislativa”. “Ya hicimos nuestras propuestas al oficialismo y tenemos expectativas de que serán receptadas así que estaremos cuando convoque a la sesión para tratar la ley ómnibus”, señaló una de las espadas parlamentarias del espacio.
Por último, en la heterogénea bancada que preside Miguel Pichetto, en sintonía con Innovación Federal, referenciado con los oficialismos de Misiones, Río Negro, Neuquén y Salta, la cautela impera. Tras emitir un comunicado el jueves pasado en el remarcaron que tienen “el compromiso de otorgar gobernabilidad y darle al Gobierno nacional las herramientas que necesita para sacar a la Argentina de esta profunda crisis”, esperan ahora que el oficialismo de sus próximos pasos.
A pesar de la voluntad de diálogo que manifestó Pichetto, el hastío de los principales referentes dialoguistas con el Gobierno quedó expuesto tras el maratónico plenario por el que se obtuvo el dictamen de mayoría. Por eso, el comunicado destaca que su bloque pretende que el debate en el recinto sea “de cara a la gente, con total honestidad y transparencia, para que no se terminen votando de madrugada y a escondidas de la sociedad cuestiones centrales para el futuro de la Argentina”. Asimismo, se espera que los diferentes espacios que componen esta bancada tengan libertad de acción para objetar los puntos que consideran “impasables”.
Ley Ómnibus: algunos artículos con los que el Gobierno dio marcha atrás
- Actualización de la fórmula de movilidad jubilatoria y pensiones, la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Asignación por Embarazo.
- Retenciones agropecuarias e industriales.
- Blanqueo gratuito para personas que declaren menos de US$100.000.
- Adelanto del pago del impuesto a los Bienes Personales.
- Actualización de las escalas del Impuesto a las Ganancias.
- Privatización de la totalidad de las empresas estatales, mixtas o con participación mayoritaria del Estado.
- Se eliminó la emergencia previsional y la de salud.
- Se modificó el artículo que establecía que reuniones de más de tres personas podían ser consideradas manifestación y se amplió el cupo a 30 personas.