El Gobierno comenzó la organización de las elecciones 2023, con la conmemoración de los 40 años del retorno de la democracia y con la apuesta de replicar los altos niveles de transparencia, confiabilidad y participación que se registraron en los últimos comicios.
“Empezamos a trabajar de cara las elecciones 2023, que van a tener una gran significación porque se cumplen los 40 años del retorno de la democracia al país y será una gran oportunidad para realizar un balance de estas décadas”, aseguró el titular de la Dirección Nacional Electoral (DINE) del Ministerio del Interior, Marcos Schiavi.
El funcionario del Gobierno aseguró que los comicios de las elecciones 2023 constituyen “un hecho muy importante para hacer un balance de lo realizado en estos 40 años” y destacó que “nos permite pensar qué tipo de democracia, con qué valores y con qué dinámica queremos tener”.
Además, el funcionario del Gobierno explicó que cuando concluya el 2022 se prevé que ya esté en marcha el 80% de las tareas que requiere el proceso que moviliza a alrededor de 35 millones de electores, con un millón de personas afectadas a su realización, y unos 500.000 fiscales, para que en 105.000 mesas en todo el país la población puede votar.
“Buscamos que la participación ciudadana vuelva a los niveles históricos después de una caída que tuvo en 2021, vinculada a la pandemia, y tener un proceso eleccionario transparente, participativo con los partidos políticos, que nos permita estar a la altura de 40 años de democracia, donde uno de los puntos salientes es lo electoral y para eso ponemos la vara bien alta”, confirmó Schiavi.
A su vez, el funcionario del Gobierno definió al sistema electoral argentino como “muy robusto”, destacó que “ya lleva muchos años de confiabilidad” y puntualizó que “ninguna fuerza política ha dudado o negado o judicializado un resultado electoral, por lo menos de las elecciones nacionales, confiando en que en que los resultados son fidedignos”.
Esta convicción de Schiavi se basa en que hay controles cruzados, ya que “el Poder Judicial y el Poder Ejecutivo trabajan mancomunadamente” y en que “hay 24 jueces federales, una Cámara Nacional Electoral, una dirección Nacional Electoral trabajando y la articulación con el Comando Electoral, quienes cuidan el hecho, la logística y la transmisión, que la asegura el Correo Argentino”.
A su vez, el funcionario del Gobierno aseguró que los próximos comicios serán “más parecidos a la elección de 2019 que a la del 2021” y confió en que “habrá algunas cosas que se mantengan” pero que seguramente se va a votar normalmente en las elecciones 2023.
“Nos olvidamos que el año pasado, a esta altura, teníamos la segunda ola de la pandemia y tuvimos que postergar la elección cinco semanas”, señaló el funcionario del Gobierno, para quien “fue una decisión correcta, que hizo que la gente vaya a votar segura”.
Schiavi aseguró que desde el Gobierno le piden “consolidar la transparencia” en las elecciones 2023, y que los partidos políticos “sean parte del proceso” por lo cual quieren que “participen de la confección de los pliegos más sensibles, que tengan voz sobre cómo se construyen esas licitaciones”.
Asimismo, Schiavi valoró la organización y los requisitos exigidos para conocer los resultados porque “no todos los sistemas electorales le permiten al ciudadano saber lo que pasó tres o cuatro horas después de que votó, eso lo naturalizamos pero no es lo normal”.
Por ello, en los comicios del 2021 “pudimos dar los resultados muy rápido en tiempo y forma, con las cifras consolidadas”, señaló Schiavi, tras lo cual recordó que en las PASO los resultados se conocieron a las 21:30 del mismo día, con más del 60% de las mesas escrutadas, y en las elecciones generales a las 21 horas, con el 83%.
Por último, el funcionario del Gobierno indicó que para avanzar en las elecciones 2023 se han realizado reuniones con apoderados de 40 partidos políticos nacionales, de las provincias de Entre Ríos, Santa Fe, Córdoba, La Pampa y Buenos aires y con jueces con competencia electoral de todo el país, organizada por la Cámara Nacional electoral (CNE) y el Banco de Desarrollo para América Latina (CAF).
