Con objetivo de conformar el Consejo de Mayo, organismo encargado de institucionalizar los 10 puntos del Pacto de Mayo, el Gobierno nacional de Javier Milei citó para el próximo martes a los tres líderes de la Confederación General del Trabajo (CGT).
Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos Acuña fueron invitados a la sede de la Secretaría de Trabajo en la Ciudad de Buenos Aires para formar parte de un encuentro a “agenda abierta” para “robustecer las relaciones y el diálogo tripartito entre el sector gremial, empresario y gubernamental”.
La intención del Gobierno, es abrir el diálogo con la CGT para que se sume al Consejo de Mayo, presidido por el jefe de Gabinete Guillermo Francos e integrado por representantes de la Cámara de Diputados, del Senado, del sector empresarial y del sindicalismo.
En este sentido, desde Casa Rosada consideran que la CGT debe asumir la voz de los gremios, en medio de la conflictividad con el sector sindical. No obstante, no se descarta la llegada de otros frentes sindicales para formar parte del Consejo de Mayo.
La citación llega dos días después de que la CGT pidiese una audiencia con el secretario de Trabajo, Julio Cordero, para reclamar por la reforma laboral aprobada en la Ley Bases, la pérdida de poder adquisitivo y la restitución de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias.
Los gremialistas acordaron pedir una audiencia al Gobierno de Milei y no motorizar presentaciones judiciales colectivas, ni tampoco convocar a un paro general. El cotitular de la CGT, Pablo Moyano, no asistirá al encuentro con la administración libertaria y recrudece la interna cegetista.
En este contexto, la cúpula de la CGT deberá dirimir si colaborará con el Consejo de Mayo. Por un lado, el moyanismo niega el diálogo con Milei, mientras que la mayoría, conducida por Héctor Daer, apuesta a tender puentes para discutir las reformas laborales que están impuestas en la Ley Bases.
