A días de la presentación de listas y a poco más de un mes de las elecciones, la interna en el radicalismo bonaerense volvió a estallar por la expulsión de 750 afiliados que en 2019 jugaron en otros frentes electorales por fuera de Juntos por el Cambio.
La decisión de excluir de los padrones esos correligionarios fue tomada por el Comité Provincial en base al artículo 10 de la Carta Orgánica y ya había sido advertida en el último picante plenario de la Unión Cívica Radical (UCR) bonaerense.
“Un Partido Político tiene reglas de juego claras y preestablecidas y en ese sentido nuestra Carta Orgánica habilita, con absoluta lógica, a excluir del padrón a aquellos que se van de la UCR para formar parte de otros espacios políticos y ello es lo que se ha hecho”, expresó Carlos Fernández.
El Vicepresidente del Comité Provincia y actual diputado nacional agregó que “es inexplicable la reacción de los mismos que eligieron irse”. “Afiliarse es un acto voluntario y abandonar el Radicalismo también lo es. Los Radicales de toda la Provincia acuerdan con la decisión del Partido”, remarcó.
En tanto, el Presidente de la Juventud Radical del distrito de Luján Alexis Hasen, dijo que “no es una vergüenza lo que decidió el Partido sino todo lo contrario”. “Vergüenza es pretender participar en la vida interna del Radicalismo cuando hace sólo unos meses atrás competían en listas de candidatos contra las de los nuestros”, precisó.
Hansen destacó que “vergüenza es armar Listas por afuera del Partido para dividirnos facilitando el triunfo de los adversarios, vergüenza es recorrer todos los espacios políticos y acordarse de la UCR cuando les conviene, vergüenza es ser funcionales al triunfo del kirchnerismo y después querer ser parte del Partido”.
En tal sentido, Horacio Barreiro consideró que “formar parte de un Partido conlleva la aceptación de presupuestos mínimos sobre su funcionamiento”. “Son las reglas de juego que definen la Convención Nacional y Provincial respectivamente y no son una sugerencia”, dijo el ex funcionario bonaerense.
“Los cuentapropistas de la política, los que creen que sus intereses personales justifican cualquier movimiento, que van saltando de Partido en Partido, que quieren estar en todos lados por su solo interés individual pretenden que la UCR permanezca inmóvil ante sus inconductas. Así no se contruye ni la política ni los Partidos Políticos”, concluyó.
