En la medianoche de este miércoles 15 de febrero Shell aplicó un aumento del 4% promedio en los precios de sus combustibles, como parte del acuerdo de incrementos mensuales sellado con el Gobierno nacional. Se espera que en las próximas horas el resto de las empresas petroleras sigan el mismo camino.
De acuerdo a lo que argumentaron desde Shell, el aumento del 4% en los combustibles pretende absorver las subas de los precios de los biocombustibles, los incrementos de los costos logísticos, y la variación del tipo de cambio oficial, que que tiene impacto en las materias primas.
De esta manera, los precios de los combustibles de Shell en las estaciones de servicio de la Ciudad de Buenos Aires pasan de $162 a $168,40 para el litro de nafta super, de $200 a $208 para la V-Power y de $182 a casi $190 para el gasoil.
Vale recordar que, en noviembre del año pasado las empresas petroleras acordaron con el ministerio de Economía, a cargo de Sergio Massa, un tope para las subas de los combustibles por el plazo de cuatro meses. Con esa base, en diciembre y en enero se aplicaron aumentos del 4%.
Ahora, desde esta medianoche Shell dio el puntapié inicial para implementar el nuevo incremento del 4% en los combustibles de febrero, mientars que en marzo próximo se espera que las petroleras ajusten el valor en sus pizarras en torno a un 3,8%, según lo acordado con la Secretaría de Comercio.
El acuerdo firmado en noviembre pasado por YPF, Panamerican Energy, Raizen y Trafigura para controlar el precio de los combustibles, se llevó a cabo con el objetivo de darle un marco de “previsibilidad” a las empresas petroleras y de contener la escalada inflacionaria.
En ese contexto, el Estado se comprometió a garantizar el acceso a divisas para las empresas, sobre todo para el abastecimiento de lubricantes. Además, acordó a reducir temporalmente impuestos en la importación de combustibles a los efectos de garantizar abastecimiento para los sectores del agro.
Por otra parte, el Gobierno oficializó la decisión de postergar la aplicación de los incrementos a los impuestos a los combustibles, correspondientes al tercer y cuarto trimestres de 2021 y al primer, segundo, tercer y cuarto trimestres de 2022, para la nafta sin plomo, la nafta virgen y el gasoil.
Con dicha medida, las empresas petroleras cuentan con el margen necesario para cumplir con el cronograma pactado de aumentos de los combustibles. Teniendo en cuenta el periodo de vigencia, se estima que la actualización en forma trimestral se realizará recién a partir del 1° de abril de 2023.
