Luego de que la Corte Suprema de Justicia definiera por unanimidad dejar la sin funciones esta semana, la exjueza de la Cámara Federal de Casación Penal, Ana María Figueroa, sostuvo este sábado que no tuvo “ningún derecho de defensa” luego de que el máximo tribunal no aceptara su pedido de licencia.
“No tuve ningún derecho de defensa”, señaló la jueza Figueroa este sábado en declaraciones radiales, y agregó: “Conmigo aplicaron una doble vara, y si me la aplican a mí, se la aplican a todo el mundo“.
Es que, la Corte Suprema cesó este miércoles en sus funciones a la jueza Figueroa, quien en agosto pasado cumplió 75 años y aún no había conseguido acuerdo del Senado para permanecer en su cargo por cinco años más, tal como lo exige la Constitución Nacional.
La decisión fue adoptada por unanimidad y notificada al Consejo de la Magistratura de la Nación “a fin de que adopte las medidas que estime necesarias” y a la Cámara Federal de Casación Penal, según surge de la resolución.
En ese sentido, Figueroa analizó que se le “adjudicó ser de la agrupación Justicia Legítima; de atrincherarse y de ser jueza de Cristina Kirchner ” para ser “descalificada” en los medios de comunicación.
“Da risa y preocupación que digan que me atrinchere. Habría que preguntarle a la Corte por qué tomó esta medida que consideró arbitraria. No he visto a las asociaciones de magistrados o jueces reaccionar ante los agravios que hicieron hacia mi persona“, apuntó la magistrada.
En tanto, la jueza Figueroa insistió en que “hay una doble vara” ya que “hay que muchos jueces cumplieron 75 años y les dieron el acuerdo” para continuar en sus cargos y que “siempre se resolvió así, hasta que se dio mí caso“.
“Confiaba en que me iban a dar el mismo trato que a mis otros colegas. Desde la Corte sacaron una resolución que no se entiende y ordenaron el cese automático de las funciones“, observó Figueroa, quien tenía en su poder decidir si se reabría la causa Hotesur- Los Sauces contra la Vicepresidenta de la Nación.
Frente a la decisión de la Corte Suprema de correrla de sus funciones tras cumplir 75 años, Figueroa evaluó que “la acción del Alto Tribunal tiene una connotación tremenda de género“, debido al trato diferencial con sus colegas masculinos.
Vale recordar que, la resolución a la que alude la jueza emitida por la Corte Suprema sostiene que la jueza Figueroa “ha perdido la investidura judicial el 9 de agosto pasado, día en que cumplió 75 años sin haber obtenido un nuevo nombramiento con el correspondiente acuerdo del Senado”.
“Tras la reforma de 1994 el artículo 99 -inciso cuarto, tercer párrafo- de la Constitución Nacional prevé que un nuevo nombramiento precedido de igual acuerdo (del Senado) será necesario para mantener en el cargo a cualquier juez una vez que cumpla la edad de 75 años”, agregan los jueces del máximo tribunal.
En ese marco, la norma agrega que “todos los nombramientos de magistrados” cuya edad sea 75 años o mayor “se harán por cinco años, y podrán ser repetidos indefinidamente, por el mismo trámite”.