Una adolescente de 17 años denunció que fue abusada sexualmente en el interior de un boliche de la localidad balnearia de Villa Gesell, ante lo cual la Justicia exigió las cámaras de seguridad del local para investigar posibles sospechosos.
Según fuentes policiales, la denunciante estaba en la madrugada del viernes en el boliche “Pueblo Límite”, ubicado en avenida Buenos Aires al 2600 de Villa Gesell, cuando, al momento de volver del baño, apareció conmocionada y le manifestó a sus amigas que había sufrido un abuso sexual.
Ante esta situación, la víctima fue trasladada en una ambulancia al hospital local, donde le detectaron prendas ensangrentadas en la zona genital, por lo que la Policía y la fiscal Verónica Zamboni iniciaron una investigación de oficio por “averiguación de ilícito”.
En la mañana del viernes, la adolescente declaró en la fiscalía y relató los “flashes” que recordaba de lo vivido, entre ello que dos jóvenes se acercaron y le ofrecieron algo de tomar.
Además, dijo que fumó un cigarrillo presumiblemente de tabaco y que luego fue llevada a un sector del complejo al que no tenía acceso cualquier cliente, por lo que la víctima cree que quienes la abusaron pudieron haber sido “gente del boliche”.
“Ella no sabe bien qué pasó, sólo sabe que había varias personas. No tiene lesiones, pero eso no quiere decir que no haya habido abuso, se hicieron hisopados y se están buscando las cámaras del local”, precisó un vocero encargado de la pesquisa.
En tanto, la fiscalía continuaba investigando a través de distintas diligencias como supervisar las instalaciones Pueblo Límite, revisar las cámaras de seguridad del lugar y secuestrar la ropa que usó la adolescente al momento del hecho.
Asimismo, también intervino personal de la Comisaría de la Mujer de Villa Gesell y del Servicio de Promoción local para brindar asistencia y contención a la víctima y a los familiares.
No es la primera vez que se registra este tipo de denuncias en el complejo bailable de Villa Gesell. Un hecho de similares características ocurrió en enero de 2019, cuando una turista de 20 años denunció un abuso sexual en el baño durante un recital del trapero Duki.
