La jueza federal María Eugenia Capuchetti impuso en las últimas horas el secreto de sumario en la causa por el atentado a la vicepresidenta Cristina Kirchner, luego de la detención de Brenda Elizabeth Uliarte, la novia del agresor identificado como Fernando Sabag Montiel.
La decisión de la magistrada se realizó tras la sospecha de que el principal acusado por el intento de magnicidio no habría actuado solo, en base a los primeros resultados de los análisis de las cámaras de seguridad.
A su vez, Capuchetti decidió la detención de Brenda Elizabeth Uliarte, pareja del atacante de Cristina Kirchner, Fernando Sabag Montiel, después de que declarara un conocido del acusado; y de que el celular del agresor de la Vicepresidenta apareciera “reseteado”.
Uliarte fue detenida anoche en la estación Palermo del tren San Martín por agentes del Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista (DUIA) de la Policía Federal, después de que se determinara que acompañó a Sabag Montiel el pasado jueves por la noche.
El pasado viernes, Uliarte dio una entrevista en la que se presentó como Ámbar, dijo que no veía a Sabag Montiel desde el martes último y se quejó de que la policía le secuestró sus pertenencias en el marco de un allanamiento.
Aparentemente, los investigadores lograron reconstruir con cámaras de seguridad que el pasado jueves la joven habría compartido con el agresor de Cristina Kirchner buena parte del trayecto hasta la casa de la Vicepresidenta, situación que contradice lo Uliarte manifestó en el reportaje.
Por otro lado, en las últimas horas declaró un hombre identificado como Mario Bongarelli, que dijo ser “conocido” del autor del atentado a Cristina Kirchner y aseguró, bajo juramento, creer que Sabag Montiel era “capaz de cometer el hecho”.
Tras declarar, el testigo entregó de manera voluntaria su teléfono celular para que sea peritado, en presencia del fiscal Carlos Rívolo y del defensor oficial de Fernando Sabag Montiel, Juan Hermida.
Vale aclarar que, antes de declarar ante la Justicia federal, Bongarelli dio una nota en televisión donde se presentó como “amigo” del responsable del atentado a Cristina Kirchner, cuya cara circula en todos los canales de televisión desde la semana pasada.
En tanto, Capuchetti ayer recibió la declaración de los peritos informáticos de la Policía Federal y de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), quienes explicaron lo que hicieron con el celular del acusado, su tarjeta SIM y el chip.
A su vez, los especialistas, le detallaron a la jueza federal las razones por las cuales el celular del autor del atentado a Cristina Kirchner hizo un “reseteo” y volvió a “estado de fábrica”, poniendo en peligro datos clave para la pesquisa.
De acuerdo a los peritos informáticos, el “reseteo” del celular de Sabag Montiel pudo ocurrir tras haberse activado de manera remota o bien por algún error de los especialistas al intentar acceder al dispositivo.
El peritaje del teléfono celular del agresor de Cristina Kirchner servía para saber si el ataque a la segunda mandataria había sido planificado o comentado previamente por Sabag Montiel con su entorno.
Portavoces judiciales ya habían señalado la sospecha de que el principal acusado por el intento de magnicidio no habría actuado solo, en base a los primeros resultados de los análisis de cámaras de seguridad.
La posibilidad de que Sabag Motiel llegó acompañado al lugar de los hechos ya era una de las hipótesis que se manejan en base al análisis de las filmaciones registradas por cámaras de seguridad en la zona del barrio de Recoleta.
