Luego de que se hiciera efectivo el traspaso de las operaciones aerocomerciales de la empresa Flybondi desde el aeropuerto de El Palomar, en Morón al de Ezeiza, desde Juntos por el Cambio pusieron el grito en el cielo contra el Gobierno nacional, mientras desde el Frente de Todos aseguraron que hay un uso político de la situación.
“Quedaba una sola empresa operando, con un solo avión que tiene 20 años de antigüedad; los protocolos que están utilizando en este contexto de pandemia no se pueden desarrollar en ese aeropuerto. Flybondi fue la línea de bandera de ese aeropuerto, los intereses económicos de esa empresa motorizaron su apertura”, dijo el diputado, Juan Miguel Gómez Parodi a Diputados Bonaerenses.
El legislador de Tres de Febrero, uno de los distritos cercanos a la zona de funcionamiento junto con Hurlingham, señaló que en el momento de su apertura, se hizo de manera inconsulta con la comunidad, y muchos vecinos de la zona estaban en contra del mismo.
El traslado de esta última línea comercial –JetSmart ya viene operando en Ezeiza desde noviembre- despertó fuertes críticas de la oposición de Juntos por el Cambio quienes sostienen que el cierre de la terminal inaugurada por el expresidente Mauricio Macri responde a “cuestiones ideológicas del kirchnerismo”.
“La postura de Macri es hipócrita, en su gestión se perdieron 130 mil puestos de trabajo. La política aerocomercial fue nefasta, la idea fue beneficiar a las low cost para desfinanciar Aerolíneas Argentinas, durante 4 años multiplicó su déficit y no pudo renovar los aviones. Quisieron que pierda más, dando facilidades a las low cost, pero también afectaron a las líneas privadas como LAN”, relató el diputado.
En tanto, desde la oposición en la región de la Primera sección electoral, planifican una marcha para el próximo jueves 17 a las 18.30 horas en “defensa del aeropuerto” aunque la convocatoria parte de “vecinos autoconvocados” que se manifestarán “en favor del desarrollo, el progreso y la inclusión” porque no quieren “voces ajenas”.
“Es importante separar, si el aeropuerto puede funcionar o no tiene que ver con cuestiones técnicas, si no están las condiciones la política no puede meterse a presionar porque puede terminar en una catástrofe. Por surte no tuvimos que lamentar un accidente aéreo, que hubiera sido posible porque en Fly Bondi eran constantes los inconvenientes, muchas veces tuvieron que volver a poco del despegue”, dijo Gómez Parodi.
Tanto desde los sectores opositores como los vecinos a favor del funcionamiento en Morón, señalaron que este cierre afectará de manera directa y negativa sobre los puestos de trabajo en restaurantes, comercios y trabajadores del transporte de la zona.
“Obviamente va a tener un impacto comercial negativo, pero la realidad es que no se puede plantear el funcionamiento de un aeropuerto para un solo avión. El proyecto de instalación se hizo de modo inconsulto, se forzaron todo el tiempo las condiciones técnicas, la pista requiere un mantenimiento que no tiene y se necesita una inversión de $4 mil millones, si no están dadas las condiciones de seguridad no se puede apostar a otra solución”, argumentó el legislador.
Por caso, un informe detalla que la pista "está hecha de losas de hormigón, que presentan un altísimo nivel de deterioro" y que por ese motivo "hoy, las aeronaves deben ser remolcadas debido al riesgo de ingesta, producto del desgrane de piedras".
“Me parece que hay una utilización política de una situación que tiene que ver con la seguridad de los pasajeros. En este contexto, el Gobierno Nacional no tomaría una decisión que afecte al comercio si no fuera estrictamente necesario por la seguridad. Plantear que es una posición política es delirante”, aseguró el diputado.
