El diputado bonaerense de Juntos Martiniano Molina se refirió a las rispideces que mantuvo en las últimas semanas con Mauricio Macri y su posterior recorrida conjunta por Quilmes, con la que el expresidente enmendó el vínculo de cara a 2023.
Después de los trascendidos en las que se hicieron públicas las críticas de Macri hacia Molina, el ex jefe comunal habló de su relación con el ex presidente, minimizó el escándalo y aseguró que “con Mauricio tengo un vínculo bueno, discutimos, charlamos, bien… hay un ida y vuelta muy respetuoso”.
Según se supo a través del diario Perfil, en un almuerzo de la cúpula del PRO en el restaurante Happening después del terremoto que generó Elisa Carrió, el expresidente sostuvo que la coalición opositora debe dejar de llevar “inventos a la provincia de Buenos Aires” y puso como ejemplo a Molina.
Sin reparos, en ese almuerzo Macri dijo a sus pares del PRO que Molina “no sabía gobernar”, y que en esta nueva etapa de Juntos por el Cambio “hay que capacitar a los candidatos a intendentes”.
Vale recordar que la gestión de Molina en Quilmes entre 2015 y 2019 fue criticada por propios y ajenos, incluso requirió de asistencia de los equipos de Horacio Rodríguez Larreta para darle cause a la administración municipal, frente a los múltiples cuestionamientos.
Según trascendió, el enojo del expresidente fue motivado por la “peña peronista” que se realizó hace un tiempo en el Darling Tennis Club de San Telmo, y que tuvo como principal orador a Juan Manuel Urtubey, quien vertió entre los oyentes algunas consideraciones negativas sobre Macri.
Lo cierto es que, en son de paz, Macri se dirigió hacia el Conurbano profundo y recorrió barrios de Quilmes junto a Molina, como parte de una serie de apariciones que el expresidente está realizando desde hace algunos meses en las que coquetea con ser candidato en 2023.
En relación a ese encuentro en Quilmes y la figura del expresidente que comenza a perfilarse para 2023, Molina dijo que Macri “es un dirigente enorme” y lo destacó como el fundador del PRO, que demostró “una capacidad enorme de conducción” y sentenció que “es un gran líder para mí”.
Al ser consultado por las posibles candidaturas en para las elecciones del año próximo, Molina evito dar definiciones y remarcó que “lo importante es que estemos todos sumando en nuestro espacio” porque “la Argentina necesita una vuelta de hoja y mirar al futuro de otra manera”.
Igualmente, Molina dejo entrever que está enfocado en la actividad electoral al aseverar que “lo importante es mantenerse claro, con objetivos, sigo trabajando, me va bien con los vecinos de Quilmes”.
Por último, al hacer una crítica de su gestión, que duró solo un mandato, Molina reconoció que pudo “hacer un montón de cosas” en Quilmes pero “no alcanzó” y recordó que el traspaso de gobierno para que asuma Mayra Mendoza “fue una de las primeras veces en las décadas que fue lógico y normal”.