Este lunes, un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) señaló que ante la caía estrepitosa de producción en la presente campaña por la sequía, Argentina tendrá que importar 9.5 millones de toneladas de soja para abastecer las necesidades de la industria de la molienda.
En ese sentido, producto de la sequía, la presente campaña de soja se ubicaría en torno a los 25 millones de toneladas convirtiéndose en la cosecha más baja de los últimos 23 años, lo que genera incertidumbre en el principal complejo aportante de divisas de la Argentina.
Por ello, desde la BCR adelantaron que para llevar adelante la molienda de poroto de soja y transformarlo tanto en aceite como en harina, habrá que aumentar el nivel de importaciones que ya se proyectan en 9.5 millones de toneladas, alcanzando cifras récord.
En tanto, el informe de la BCR destacó que Paraguay aportaría 5 millones de toneladas de soja, Bolivia y Uruguay sumarían en conjunto 1.5 millones de toneladas.
Sin embargo, para los especialistas de la BRC,“la gran incógnita” se encuentra en las importaciones de soja que puedan llegar desde Brasil, en principio sostienen que se ubicaría en 3 millones aunque podría superarse la cifra, ya que el país vecino se encamina a una cosecha récord que superaría los 150 millones de toneladas.
“De esta manera, ante esta estimación de producción, de carry, y de toneladas importadas, la oferta total de la campaña 2022/23 alcanzaría 40.5 millones de toneladas, un mínimo desde la campaña 2008/09″, destacaron los economistas de la BCR, Emilce Terré y Tomás Rodríguez Zurro, encargados de realizar el informe.
Molienda de soja
Sobre la molienda de soja, la Bolsa de Comercio de Rosario (BRC) proyecta un crush total de 29.2 millones de toneladas, una cifra que contempla tanto la extracción por solvente como la molienda por prensado.
“La molienda de soja de extracción por solvente, es decir, aquella que se realiza en las grandes plantas de molienda de oleaginosas (la gran mayoría ubicadas en Rosario) se proyecta en 28 millones de toneladas, un mínimo desde 2002/03. Esta fuerte caída impactará fuertemente en la actividad económica de la región”, agregaron Terré y Zurro, economistas de la entidad.
Es preciso mencionar que, el informe de la BRC considera solamente uno de los sectores productivos donde se puede apreciar el impacto de la sequía, en este caso, la molienda de soja.
“El ingreso de camiones con soja a las terminales de Rosario proyecta una caída de la mitad respecto de un año normal. Usualmente, en una campaña buena, arriban a las plantas de molienda de la zona alrededor de 1 millón de camiones. Sin embargo, bajo estas proyecciones se estima que el ingreso de camiones durante la campaña alcance sólo 550.000 unidades”, adelantaron desde el informe de la BCR.
Cabe destacar que, el presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro Exportador de Cereales (CIARA-CEC), Gustavo Idígoras, emitió un duro pronóstico sobre el efecto de la sequía en el sector de molienda, el cual a mitad de año podría paralizar la actividad del principal complejo generador de divisas del país.
“Nosotros con el nivel de ventas actuales de soja que estamos proyectando y si no hay ningún tipo de ingreso de poroto (soja) de otros países del Mercosur, estaríamos después de agosto sin actividad en todas las plantas de molienda de la Argentina. Por los efectos de la sequía, la principal industria de generación de divisas del país, puede cerrar a mitad de año por falta de materia prima”, manifestó Idígoras.
