Luego de la protesta por parte del sector panadero y el posterior llamado a un boicot comercial, los 28 molinos que optaron por dolarizar las tarifas por la fuerte devaluación dieron marcha atrás con la decisión.
El comunicado emitido por Molinos Cañuelas afirmó que “se ha decidido quitar la cláusula dólar que se incluía en las facturas”, pero aclararon que sólo alcanza a “las facturas con mora”.
En rigor, la semana pasada la Federación Argentina de la Industria del Pan y Afines (Faipa), que reúne a más de 40 mil comercios, pidió que los panaderos eviten comprar harina a las empresas que emitan facturas en dólares.
“Sugerimos a nuestros asociados que hagamos valer nuestro derecho de no realizar compras y con esta medida simbólica rechazamos de manera categórica esta especulación", habían manifestado desde Faipa.
En ese sentido, las consecuencias no tardaron en llegar y las empresas, sobre todo Molino Cañuelas que es dueña del 45% del mercado molinero, comunicaron que retirarán las cláusulas que ataban sus productos al valor del dólar.
“El objetivo de esta cláusula era el revertir el alargamiento de los plazos de las cobranzas que, sumado a las altas tasas de interés y la aceleración de la devaluación de los últimos tiempos, viene afectando al sector”, apuntó el texto de Cañuelas.
El valor de la bolsa de harina de 50 kilos que compran las panaderías pasó de $230 en febrero de 2018 a $1.500, por lo que ascendió un 552,17% en un año y medio, mientras que el precio del pan subió un 100% en ese mismo período.
