Horas después que se conociera el hackeo de los correos electrónicos del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Chile, salió a la luz un informe que involucra directamente al actual presidente argentino, Alberto Fernández y lo califica como alguien que “tiene la costumbre” de “inmiscuirse de algún modo en la política interna de países vecinos”.
El Gobierno de Chile ordenó en las últimas horas una investigación sobre una “falla de seguridad” que permitió el hackeo, atribuido al grupo activista Guacamaya, de más de 300.000 correos electrónicos de la cúpula militar.
En esos correos hackeados al Estado Mayor Conjunto chileno (EMCO), se habla de Alberto Fernández como un mandatario que se inmiscuye en la política interna de los países limítrofes y analiza uno por uno los casos.
Sobre Alberto Fernández y su “intervención” en la política interna de países vecinos, los correos hackeados dan cuenta que los militares chilenos mencionan el apoyo que hizo el mandatario argentino a Lula da Silva como “eventual próximo candidato presidencial” en Brasil y como esto desató la furia de Jair Bolsonaro.
Por otro lado, los militares mantuvieron conversaciones con gran preocupación sobre los encuentros que mantuvo Alberto Fernández con “dirigentes opositores de la izquierda chilena” durante el gobierno Sebastián Piñera.
Además, los correos del Estado Mayor Conjunto chileno hacen referencia a la propuesta de Alberto Fernández al presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador para crear un eje contra la inequidad social junto a un eventual gobierno de Lula da Silva en Brasil. “Tal secuencia de hechos, más allá de ser una posible costumbre del mandatario argentino, también es coherente con la política exterior argentina”, detalla el informe revelado por Bio Bio Chile.
Vale mencionar que Alberto Fernández es actual titular de la UNASUR y en 2020 estuvo al frente del MERCOSUR, dos cargos que, más allá de sus intereses particulares, lo hicieron estar cerca de la política latinoamericana en los últimos años.
Los documentos militares sobre la relación entre Boric y Alberto Fernández
En los documentos filtrados también mencionan las intervenciones del presidente Boric durante su visita a Argentina donde resaltó la “profunda hermandad” entre las dos naciones y que “en la Patagonia no hay fronteras”.
Después de esa frase de Boric, en el Estado Mayor Conjunto chileno comenzaron a hablar en los correos hackeados de “un potencial argumento para la estrategia argentina sobre los Campos de Hielo Sur el Estrecho de Magallanes y la Plataforma Continental Extendida”, porque “el país trasandino impulsa la tesis geopolítica de la prolongación natural de su territorio”.
En los correos centrados en la política internacional ejercida por Alberto Fernández, también mencionan las reacciones que hubo en Argentina tras los dichos de la ex ministra Izkia Siches cuando comentó que “no se puede poner el grito en el cielo cuando uno habla de Wallmapu”, se refería a un concepto ancestral mapuche que incluye territorios de lo que hoy son Chile y Argentina.
Por otra parte, los correos filtrados hay un documento titulado “Informe de estimación de riesgo de amenazas” y que fue enviado en abril de 2022: en éste, dos altos miembros del EMCO hablan de temas relacionados a Argentina y a la seguridad nacional chilena.
“Un 46% de probabilidades de que se produzcan alteraciones a la seguridad nacional y al normal desarrollo de las relaciones diplomáticas bilaterales, a razón de exhibir un escenario Anormal”, dice uno de los párrafos del documento revelado por el sitio local Bio Bio Chile.
La preocupación chilena por la presencia militar argentina en la Patagonia
Basados en la frase dicha por Boric (“en la Patagonia no hay fronteras”), las Fuerzas Armadas chilenas pusieron foco en los últimos meses “Argentina está desarrollando un plan para robustecer la presencia militar en Tierra del Fuego”.
Bio Bio Chile revela que los correos detallan que “el rediseño estratégico que busca solucionar la ‘discontinuidad territorial’ del continente con ‘la isla (fueguina)’ y de ésta con la Antártida Argentina, destacando la posición geográfica ‘frente a la presencia militar británica en las Malvinas’”.
Por último, los militares chilenos ven con preocupación el despliegue en Río Grande de un radar para vigilar y controlar el espacio aéreo, el plan de construir bases militares en Ushuaia y la instalación de una unidad del ejército en Tolhuin, en Tierra del Fuego.
